El sindicato de futbolistas de la MLS externó su decepción por la orden migratoria que emitió el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
El mandatario firmó un decretó que prohíbe la entrada de refugiados musulmanes de Siria, Irán, Sudán, Libia, Somalia, Yemen e Irak durante 90 días al país.
La Casa Blanca ha defendido las restricciones en medio de las protestas que se realizaron el fin de semana.
El líder del sindicato, Bob Foose, expresó su preocupación no sólo por los deportistas agremiados y sus familias, también por la gente a la que afectó la orden implementada.
“Los detalles sobre el impacto práctico de la prohibición todavía están emergiendo y todavía estamos clasificando el impacto potencial en nuestros jugadores y sus familias”, comentó el directivo en un comunicado.
“Estamos decepcionados por la prohibición y creemos que va en contra de los valores de inclusión que nos definen como nación”.
El sindicato aplaudió la postura de Michael Bradley, capitán de la Selección estadounidense externó en un mensaje de Instagram su molestia por el decreto firmado por Trump.
“Estamos orgullosos de la constructiva y mesurada manera en la que Michael Bradley expresó su sentimiento sobre la prohibición”, se lee en el texto.
“Es nuestro profunda esperanza que este liderazgo fuerte y estable nos servirá como guía durante estos tiempos difíciles”.
El capitán de la selección de Estados Unidos, Michael Bradley, expresó su vergüenza e indignación por la política de Trump.
“La parte que dejé fuera es qué tan triste y avergonzado estoy. Cuando Trump fue electo, sólo esperaba que el Presidente Trump fuera diferente al candidato Trump. Que la retórica xenofóbica, misógina y narcisista fuera reemplazada por la de alguien humilde y mesurado para dirigir a nuestro país. Estaba equivocado”, dijo.
