La Comisión de Debates Presidenciales (CPD) invitó sólo a los candidatos de los dos partidos mayores al evento del 26 de septiembre, y excluyó al candidato del Partido Libertario, Gary Johnson, y la candidata del Partido Verde, Jill Stein, que habían esperado que el evento les pudiera ayudar para hablar directamente a un electorado infeliz junto con los dos candidatos principales.
La comisión señaló en un comunicado que Johnson y Stein no registraron el respaldo suficiente en las encuestas como para ser invitados. La comisión ha fijado un límite de al menos 15% en un promedio de cinco sondeos. Johnson promedió 8,4% y Stein 3,2%.
Donald Trump está alertando a los moderadores de que él estará observando para ver si son muy duros con él.
En una serie de entrevistas que ha concedido en la última semana, el candidato republicano ha dicho que “el sistema está siendo amañado” en su contra. El primero de los tres debates programados entre Trump y la candidata demócrata Hillary Clinton se realizará el 26 de septiembre y tendrá como moderador al periodista Lester Holt, de la cadena NBC.
“Creo que es terrible”, dijo Trump al Fox News Channel durante el fin de semana. “Ellos quieren que el moderador esté en contra de Trump”.
Su comentario está basado en las críticas que Matt Lauer, de NBC, recibió en algunos círculos de que fue demasiado indulgente con el candidato republicano en un foro sobre seguridad nacional efectuado anteriormente este mes. Trump, quien ha calificado a Lauer de “muy profesional”, dijo a CNBC que él cree que esto le pone presión a otros moderadores para que sean muy duros con él y eviten así las críticas que recibió Lauer.
Las tácticas de Trump podrían salirle contraproducentes con el público, dijo Alan Schroeder, autor de “Presidential Debates: 50 Years of High-Risk TV” (“Debates presidenciales: 50 años de televisión de alto riesgo”).
“A mí, esto me parecen gimoteos”, dijo Schroeder, profesor de periodismo en la Universidad Northeastern. “Estas personas están postulándose a la presidencia de Estados Unidos. Tienen que poder manejar mucha presión y tienen que enfrentar muchas circunstancias fuera de su control… No me parece muy presidenciable”.
