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    Mariely Adame Villvalva, estudiante universitaria de Riverside, muestra la tarjeta que recibió por medio de la solicitud de Acción Diferida. El 13 de diciembre Mariely recibió su permiso.

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    Mariely Adame Villalva recibió su tarjeta y ahora se prepara para enviar la solicitud para obtener un número de Seguro Social.

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Como les mencioné hace unas semanas, el 13 de diciembre recibí la gran noticia que tanto mi acción diferida y autorización de empleo fueron aprobadas.

Fue una sensación de logro.

Una semana después, por la tarde del 19 de diciembre, llegó un sobre que contenía mi nueva tarjeta de autorización de empleo: está marcada en azul y rojo, con el sello del Departamento de Seguridad Nacional (Homeland Security). Mi primera reacción fue asegurarme de que mi nombre estuviera escrito correctamente, junto con el resto de la información.

Mientras sostenía la tarjeta, sentí una liberación.

Era una tarjeta de plástico – sólo una tarjeta de plástico – pero con poder de pronunciar mi nueva identidad; una tarjeta que últimamente a cambiado mi vida.

Con esta tarjeta, ahora soy capaz de dar los próximos pasos y solicitar un número de Seguro Social válido, el conjunto de números que funciona como la llave para abrir las puertas de mejores empleos y oportunidades.

Con el fin de solicitar la tarjeta de Seguro Social, es importante recopilar la información adecuada. En una carpeta, reuní mi pasaporte, mi tarjeta de autorización de empleo, y mi solicitud para solicitar y presentar en la oficina de Seguro Social.

Preparándome para un nuevo año, yo estoy dispuesta a salir de mi zona de confort y comenzar a construir mi camino de logros.

Al comenzar mis dos últimos trimestres, y por primera vez, seré capaz de concentrarme en mis estudios sin la preocupación de los problemas financieros. ¿Por qué o cómo?, usted puede preguntar.

Bueno, el año pasado por estas fechas, solicité la ayuda estudiantil a través de la Ley de Sueño de California (California Dream Act).

Así, las subvenciones estatales, conocidos en inglés como Cal Grants, se hicieron disponibles para universitarios indocumentados como yo, a partir del 1 de enero 2013.

Cuando recibí esta noticia me quedé sin palabras, sorprendida y con los ojos llorosos sólo pensaba en mis padres y la noticia increíble que estaba a punto de decirles. Gracias a Dios, me fue concedida la matrícula completa para el resto de este año escolar.

Con esta nota, “Querer es poder”, con mucho empeño y fuerza, sigo mis pasos al éxito.

Para información sobre cómo solicitar un Seguro Social, visite http://www.socialsecurity.gov/online/ss-5.pdf y para detalles sobre la asistencia financiera, visite http://www.csac.ca.gov/dream_act.asp.

Nota de la editora asistente: Mariely Adame Villalva estará narrando – exclusivamente para La Prensa – su proceso al solicitar la Acción Diferida. La Prensa será el “diario” de Adame. Siga su historia en La Prensa; en www.laprensaenlinea.com; Facebook: La Prensa del Inland Empire o en Twitter: @LaPrensaSoCal.