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Las transacciones bancarias desde un dispositivo móvil es una de las muchas tendencias que están aprovechando los piratas cibernéticos, afectando a clientes confiados quienes utilizan aplicaciones que no son necesariamente seguras. Banking with a mobile device is one of the many trends hackers have begun to take advantage of, victimizing unsuspecting customers who use online banking apps that aren't necessarily secure.
Las transacciones bancarias desde un dispositivo móvil es una de las muchas tendencias que están aprovechando los piratas cibernéticos, afectando a clientes confiados quienes utilizan aplicaciones que no son necesariamente seguras. Banking with a mobile device is one of the many trends hackers have begun to take advantage of, victimizing unsuspecting customers who use online banking apps that aren’t necessarily secure.
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A mediados de 2011, cerca de 200,000 tarjetahabientes de Citigroup recibieron una noticia inquietante. Un grupo de piratas cibernéticos pudieron penetrar el sistema del banco gigantesco, una brecha de seguridad que les dio acceso a los nombres, direcciones de correo electrónico y números de cuentas de los clientes.

La noticia de la brecha creó una sensación de pánico en los clientes de Citi. A pesar de que los piratas cibernéticos no lograron acceso a los números de Seguro Social, fechas de nacimiento, fechas de expiración de las tarjetas y códigos de seguridad de las mismas, los clientes cuya información fue objeto de sustracción quedaron expuestos a otras maniobras fraudulentas. Tener acceso a nombres e información sensible complementaria como las direcciones de correo electrónico y números de cuenta les permite a los delincuentes perpetrar fraudes masivos, por lo cual los clientes de Citi corren grandes riesgos.

La entrada a la base de datos de Citi no es la única que causó pánico. Poco antes de que Citi revelara la brecha en su seguridad, otra operación fraudulenta se llevó a cabo en People’s Federal Credit Union de Texas, donde los piratas cibernéticos utilizaron un programa para generar números de tarjetas de débito que luego usaron en otros estados donde no se pide el número de identificación personal (PIN) para hacer una transacción. La operación dejó sin dinero en la cuenta de gran parte de los clientes del banco, aunque el mismo insistió en que las sumas se reemplazarían. En Australia, otra brecha de seguridad provocó que algunos bancos cancelaran tarjetas de crédito para proteger a sus clientes.

Estos incidentes ocurrieron a semanas de distancia unos de otros, sembrando la desconfianza en las operaciones bancarias por Internet.

Aunque es confiable asumir que habrá brechas de seguridad futuras, eso no implica que los clientes deban abandonar las operaciones bancarias en línea. Sin embargo, sí quiere decir que es preciso tomar más en serio la seguridad. Las medidas siguientes son algunas de las maneras mediante las cuales podemos protegernos de los delincuentes que buscan acceso a nuestra información.

Desconfíe del “correo basura”. El “correo basura” es menos predominante de lo que fue en otros tiempos, pero eso no implica que sea menos peligroso. Los hiperenlaces que contienen esos mensajes son una de las formas más comunes con las que los piratas cibernéticos logran acceso a la información privada. Proteja los celulares y otros dispositivos móviles. Los dispositivos móviles son similares a computadoras y necesitan la misma protección. Cada vez más personas realizan operaciones bancarias desde sus teléfonos celulares y otros dispositivos, pero podrían sorprenderse al saber que las aplicaciones bancarias para celulares no son muy seguras.

Cambie las contraseñas. Cada vez se hace más difícil recordar las contraseñas. Mientras más se navega por la Internet, más propensión hay a la solicitud de crear un nombre y contraseña de usuario para cuentas de correo electrónico, operaciones bancarias, acceso a cuentas en Internet y todo lo que implica información sensible.

Supervise diariamente sus cuentas en Internet. Como respuesta a la brecha de seguridad de Citi, muchos clientes pueden haber considerado la cancelación de sus cuentas en línea. Sin embargo, tal decisión sólo dificultará la supervisión de las actividades financieras.


Vocabulario

1. Roughly – cerca de, aproximadamente

2. Hackers- piratas ciberneticos

3. Wary – desconfianza , cautela

4. Junk e-mail – correo basura

5. Monitor – supervisar


Safety measures to take when banking online

In mid-2011, roughly 200,000 Citigroup credit card customers received some startling news. Hackers had accessed the gigantic bank’s system, a security breach that exposed account holder’s names, e-mail addresses and account numbers to hackers.

News of the breach created a sense of panic among Citi’s customers.

Despite the fact that customers’ social security numbers, dates of birth, card expiration dates, and card security codes were not compromised, the breach did leave those customers whose information was accessed susceptible to further fraud.

Having names and matching sensitive information, such as e-mail addresses and account numbers, enables hackers to potentially perpetuate mass fraud, leaving Citi customers at great risk.

The Citi breach wasn’t the only breach to cause panic. Shortly before Citi revealed its security had been compromised, a banking breach at the People’s Federal Credit Union in Texas was victimized by hackers who used a software program to generate debit card numbers which they then used in other states that do not require PIN numbers to make a transaction. That breach left many of the credit union’s customers with nothing in their accounts, though the credit union insisted the money would be replaced.

In Australia, a security breach caused a handful of banks to cancel credit cards in an effort to protect customers.

These incidents occurred within weeks of one another, leaving many account holders wary of online banking. While it’s safe to assume there will be future security breaches, that doesn’t mean banking customers should abandon online banking.

But it may mean customers should take security more seriously. The following security measures are some of the ways men and women can protect themselves from criminals looking to access their information.

Be wary of junk e-mails. Junk e-mail is less prevalent than it once was, but that doesn’t mean it’s now harmless. In fact, hyperlinks within junk e-mails are one of the more common ways hackers gain access to private a information.

Protect mobile devices. Mobile devices are the same as computers and they need the same protection. More and more people bank through their mobile devices, but those people might be surprised to know mobile banking apps are not always very secure. Change passwords. It’s getting increasingly difficult to remember passwords. The more people go online, the more likely they are to be asked to create a username and password. Each is required for e-mail accounts, online banking, accessing bills online, and just about anything else that involves sensitive information.

Monitor accounts online daily. In response to the Citi breach, many customers may have considered closing online accounts. However, such a measure makes it more difficult to monitor financial activity.