Skip to content
Un funcionario toma notas en la escena de un accidente de autobús cerca de Yucaipa. Los equipos de inspectores federales se dirigirá a las empresas de autobuses con un historial de problemas como parte de una campaña nacional destinada a eliminar a los operadores inseguros en respuesta a la reciente gira de autobús mortal accidentes, dijo el gobierno.
Un funcionario toma notas en la escena de un accidente de autobús cerca de Yucaipa. Los equipos de inspectores federales se dirigirá a las empresas de autobuses con un historial de problemas como parte de una campaña nacional destinada a eliminar a los operadores inseguros en respuesta a la reciente gira de autobús mortal accidentes, dijo el gobierno.
Author
PUBLISHED: | UPDATED:

Una semana después de un accidente fatal cerca de Yucaipa, oficiales federales de transporte anunciaron medidas severas para controlar a operadores de autobuses peligrosos que podrían incluir la descontinuación de algunos de ellos.

La Administración Federal de Seguridad de Transportes Motorizados planea llevar a cabo una revisión en los próximos dos meses en la cual trabajará en conjunto con agentes de refuerzo policial para investigar y suspender a las compañías de autobuses que muestren señales de procedimientos potencialmente peligrosos, según informó el Departamento de Transporte en un comunicado el jueves 14 de febrero.

Los inspectores y auditores de la agencia recibirán entrenamiento especializado para detectar áreas de preocupación en horarios operativos, almacenamiento de equipo y adiestramiento de conductores. También analizaran el uso de conductores de medio tiempo que trabajan más horas que un operador de autobús de tiempo completo.

“Nuestra meta fundamental es asegurar la seguridad de los pasajeros en nuestras carreteras y salvar vidas”, comunicó el secretario estadounidense de Transporte, Ray LaHood. “Hemos visto las trágicas consecuencias cuando las compañías de buses cortan el presupuesto y no hacen de la seguridad una prioridad.

El choque de autobús del 3 de febrero en la carretera 38 al norte de Yucaipa y el choque del 30 de diciembre en el este de Oregon llevaron al Departamento de Transporte a reunir a grupos de la industria de buses, de refuerzo de ley y de seguridad para considerar cambios.

Ocho personas perdieron la vida en el devastador choque cerca de Yucaipa en un bus propiedad de la compañía Scapadas Mágicas, con sede en National City. El bus regresaba a Tijuana de una excursión a Big Bear cuando sus frenos aparentemente fallaron.

El vehículo aceleró fuera de control, impactó a un automóvil y luego chocó de manera frontal contra una camioneta, destruyéndola, antes de volcarse y lanzar a varios pasajeros al camino montañoso.

El 8 de febrero, el gobierno federal cerró la compañía Scapadas Mágicas y la declaró un “peligro inminente a la seguridad pública”.

Nueve personas murieron y 38 resultaron heridas en el accidente en Oregon, en el cual el bus resbaló fuera de un camino congelado y cayó 200 pies desde una colina. El conductor del bus había trabajado 92 horas en un periodo de ocho días, sobrepasando el límite federal de 70 horas, según descubrió una investigación. La compañía del buses, con sede en Vancouver, Canadá, ha cerrado sus puertas y el conductor del bus ya no puede conducir buses en los Estados Unidos.

Steve Keppler, director ejecutivo de la Alianza de Seguridad de Vehículos Comerciales (CVSA, por sus siglas en inglés), un grupo no lucrativo de representantes de la industria y oficiales de seguridad, dio la bienvenida al anuncio del Departamento de Transporte.

“Creo que todos en CVSA estamos comprometidos con tratar estrategias nuevas y diferentes”, comentó. “Ciertamente apoyamos el aumento de estrategias de refuerzo de ley”.

Uno de los desafíos para la agencia será dedicar los recursos adecuados para el trabajo, agregó.

La Administración Federal de Seguridad de Transportes Motorizados supervisa la seguridad de 525,000 vehículos, como buses y tráileres. Eso incluye 4,000 agencias de buses que realizan más de 700 millones de viajes con pasajeros cada año. La agencia cuenta con 400 investigadores, inspectores y auditores.

Hace un par de años, el Congreso prohibió las inspecciones de carretera en los buses a menos que exista un claro peligro. Keppler dijo que los oficiales de ley deben de contar nuevamente con esa herramienta, notando que los agentes no pueden detener a los camiones de esa forma.

“Creo que sería difícil discutir qué clase de carga es más importante, la gente o los bienes”, comentó.

Kip Sturgeon, un residente de Highland que conduce buses varias veces al mes y organiza viajes para grupos juveniles de California, dijo que espera que la nueva iniciativa lleve a cambios. Pero la agencia de transportación ha hecho promesas similares en el pasado, agregó.

Sturgeon dijo que la industria de buses ha visto un aumento en lo que él llama “operadores renegados” que no entrenan a sus conductores apropiadamente o mantienen sus vehículos en buenas condiciones. Él dijo que le gustaría que el gobierno tome acciones serias para clausurar a dichos operadores, y no solo extender advertencias.

“En verdad espero que lo tomen en serio esta vez”, finalizó.

The Associated Press contribuyó con el informe.