Durante la vigilia del los participantes pidieron una oración por la hermandad, hicieron una plegaria en memoria de las víctimas de la imperante violencia, pidieron coexistir en harmonía, de vivir pacíficamente entrelazando los corazones.
Organizada el jueves, 4 de septiembre en San Bernardino, en gran parte por las Congregaciones Unidas para el Cambio (ICUC por sus siglas en inglés), el evento tuvo como principal objetivo abordar la problemática de la violencia en la ciudad de San Bernardino y tratar de buscar maneras de como detener la imperante ola de criminalidad – ola que ha destrozado la vida de cientos de familias en los últimos años.
“Como residente de San Bernardino y miembro de la iglesia Nuestra Señora del Rosario, tengo pavor de saber que una madre de la congregación ha perdido a dos hijas a manos de la violencia en nuestra ciudad. Es tiempo que trabajemos juntos para prevenir más muertes. La vida es sagrada y todas deberían ser tratadas con valor y respeto”, comentó Jesse Chávez, líder de ICUC.
Chávez se refirió a Linda Miers, madre de Melanie y Michelle Miers, quienes fueron asesinadas en el 2005 y en julio pasado, respectivamente.
Por obvias razones, Miers no concedió comentario alguno a la prensa; sin embargo, Karla Elizarraraz instó a las autoridades a triplicar los esfuerzos para combatir la criminalidad –esfuerzos apoyados por la comunidad.
“Ya basta de tanta violencia, ya basta de tantos hogares destrozados. Queremos, como comunidad, cooperar con las autoridades para ponerle un alto a tanta violencia. Es tiempo de detener el sufrimiento. Juntos podremos lograrlo”, comentó Elizarraraz en las escalinatas del ayuntamiento de la ciudad en donde culminó la marcha con una vigilia.
Michelle Miers es tan solo una de las 34 víctimas de homicidio en lo que va del año en la ciudad de San Bernardino. Datos indican que a estas alturas el año pasado el número de homicidios fue de 30. Y es que la violencia en San Bernardino ha rebasado los límites afectando no solo a miembros de la comunidad sino también a oficiales del orden.
Hace dos semanas, el oficial Gabe García fue baleado por un delincuente con un rifle de grueso calibre – heridas que pusieron su vida en un hilo y que incluso lo llevo a estado de coma. El jefe de policía de la ciudad Jarrod Burguan dijo que García ha recobrado la conciencia y que incluso ya reconoce a personas – señales de mejoramiento – “todo un milagro”, añadió Burguan.
“Nosotros no podemos hacerlo todo, necesitamos de su esfuerzo, necesitamos que sean modelos a seguir y guías para los niños y jóvenes”, comentó Burguan.
El alcalde Carey Davis señaló que la lucha contra la violencia comienza en el hogar, en el entorno familiar. Davis dijo que su administración ha diseñado un programa que ataca directamente el problema a través de operativos sorpresas a complejos habitacionales.
“Sabemos que el entorno es vital en la prosperidad del individuo y también sabemos que la educación es primordial. Con esto en base atacaremos a los dueños de complejos de apartamentos para que mejoren la calidad de vida y así eliminar focos rojos”, dijo Davis.
Dale Marsden, superintendente del Distrito Escolar Unificado de la Ciudad de San Bernardino, concordó con Davis mientras se comprometía a trabajar incansablemente por el bienestar educativo de cada uno de los casi 50,000 estudiantes, de los cuales el 73 por ciento son de origen Hispano.
Karen Esparza, estudiante de la escuela Preparatoria Arroyo, aseveró que los esfuerzos resultarían en vano si es que la Propuesta 47 en la boleta de noviembre no es aprobada. Según ICUC, la propuesta destinaría recursos monetarios a las comunidades para la implementación de programas educativos, servicios a víctimas, y consejería en alcoholismo y abuso de drogas.
Mientras la ayuda llega, David Starr, reverendo de la iglesia Episcopal San Juan, de San Bernardino, instó a la comunidad a seguir una vida religiosa y a vivir entendiendo que toma una villa para crecer a un niño.
“Esa villa la formamos todos nosotros, maestros, líderes de la comuna, oficiales del orden, empresarios, y demás. Nosotros como villa podemos trabajar para mejorar la calidad de educación, la cual a su vez sacará a la gente de la pobreza y les brindará un mejor futuro”, comentó Starr en las afueras del edificio del distrito escolar, una parada de la marcha.