Durante el Festival de Cine de Newport Beach, el cual finalizó esta semana, la presencia del Cine Latino fue obvia.
Se exhibieron varios cortometrajes, entre ellos “Selling Rosario” o “Vendiendo a Rosario”, el cual provocó una buena recepción entre sus asistentes durante su presentación en una sala de Newport.
“Selling Rosario” es un corto actuado por un elenco totalmente Latino y también es producido por mujeres Latinas, quienes se unieron al proyecto para llevar un fuerte mensaje, no sólo a sus espectadores, si no también a la industria del cine la cual, según los directores del short, es representado por sólo el 3 por ciento de los Latinos en los Estados Unidos.
El galardonado corto habla de una familia de campesinos inmigrantes que se unen para darle una mejor vida a su hija menor, Rosario, quien a pesar de su corta edad goza de un talento único que el público no logra reconocer hasta el final de la intrigante historia.
Los 16 minutos de filme, que fueron grabados en un campamento de campesinos en Bakersfield, Calif. se desenvuelven en un mundo campestre de pobreza, huertos, soledad.
Pero entre el medio de todo eso existe mucha esperanza para una niña (Rosario) de 12 años por parte de su familia y una comunidad, quienes juntos buscan romper con los estereotipos de los trabajadores campesinos y alzan a esta joven al éxito con su inesperado talento con el violín.
“Esta es la historia de los papás que tienen sueños y esperanzas para sus hijos. Un escritor podría contar una historia similar en un mundo inventado, pero nuestra película se basa en hechos reales – en un campamento de campesinos inmigrantes del cual nuestro talento se sintió auténtico a ese mundo”, dijeron colectivamente los directores y escritores del corto Michael Winokur e Iana Simeonov, durante la presentación de su filme el lunes, 25 de abril.
El trama del cortometraje toma un giro inesperado.
Antes de que la audiencia tenga la oportunidad de descubrir el talento musical de Rosario, los escritores y productores del short yuxtaponen elementos de la vida de la jovencita. Esa unión directa tiene el fin de distraer al espectador con escenas de violencia, pobreza, dinero “sucio” (dinero que al final sirve para abrir el alma del público). Además, el espectador se sienta a ver la filme ya bajo un poco de prejuicio; el título, “Vendiendo a Rosario”, puede ser malinterpretado.
Pero todo eso añade al trama.
“Quisimos contar una historia universal sobre una familia y una comunidad que se habían unido para ayudar a esta chica joven a tener éxito. A la misma vez también jugamos con el papel de ella [Rosario] y con uno de los estereotipos que parece no tener fin con los actores Latinos en la pantalla grande”, añaden Winokur y Simeonov.
En el corto también aparecen varios actores que ya empiezan a ganar reconocimiento en Hollywood, entre ellos Mía Xitlali, quien recientemente tuvo un papel en la película “Max” de la distribuidora MGM. Otros actores que también se destacan en la película corta son Cristina Valle, quien ha participado en varias proyectos de cine en los Estados Unidos, al igual que Robert Renderos y William Guirola.
Winokur y Simeonov también dijeron que se encuentran trabajando en el desarrollo de un libreto para una película que será inspirada en el papel de Rosario, en la que se verán temas migratorios en los Estados Unidos como la reforma migratoria y el caso de muchos “Dreamers” que ven a América como su única casa.
“Selling Rosario” se ha exhibido por 17 festivales en toda la nación y sus productores esperan muy pronto conseguir todo lo necesario para licenciar la película y pueda ser vista por un público mas amplio.
Entre otros “shorts” que también se exhibieron durante el festival que finalizó el 28 de abril, se encuentran “Sophie”, Cowboys” y “Letter to God”.
Aún puede ir al Festival del Cine Newport Beach. Busque películas de su interés: www.newportbeachfilmfest.com.
