Cuando Lawrence Sánchez y Rafaél Rodríguez vieron la vida de una mujer en peligro, se pusieron en acción.
Sánchez, un conductor de camiones de Yucaipa para UPS, y Rodríguez, una residente de Riverside, ayudaron a sacar a Denise Ana Pérez del asiento trasero de una camioneta en llamas sobre la Autopista 60 rumbo oeste en el Valle de Jurupa en septiembre, salvándole la vida.
Ellos fueron honrados el jueves, 10 de julio por la mañana en el Centro de Entrenamiento Regional Ben Clark. La Patrulla de Caminos les entregó a Sánchez y Rodríguez el reconocimiento de Resolución del Comisionado, felicitándolos por su valentía.
“Si no hubieran decidido detenerse, tal vez esta joven mujer no estaría aquí con nosotros ahora”, dijo Tom McCreary, director asistente de la división del Inland de la Patrulla de Caminos. “Ellos hicieron su propia seguridad a un lado y tomaron el tiempo para salvar una vida, y por lo que han hecho merecen el reconocimiento”.
Sánchez conducía su camión de UPS rumbo al centro de operaciones de la compañía en Riverside, mientras que Rodríguez conducía a casa después del trabajo cuando sus vidas se interceptaron. Pérez y su familia conducían una camioneta cuando fueron golpeados por detrás por un vehículo Lexus color negro, lo cual causó que la camioneta se incendiara en llamas.
“Tan pronto como ocurrió el choque, pisé los frenos e instantáneamente su camioneta se incendió”, recordó Sánchez. “Vi como el conductor salió por la ventana del pasajero y lo vi jalar algo del asiento trasero. Antes de darme cuenta de lo que era, vi como un brazo apareció y me di cuenta que él estaba tratando de sacar a alguien del vehículo”.
“Saqué mi extinguidor y corrí por la autopista. Cuando llegué, toda su cabeza estaba en llamas. Fue horrible. Inmediatamente rocié el extinguidor en su cabeza, en la cabina, debajo del vehículo, y eso le dio al otro buen samaritano el tiempo suficiente para sacarla”.
Rodríguez era uno de los que trataba de sacarla.
“Salí de mi vehículo y corrí hacia allá y vi a la hija tratando de salir, pero la puerta estaba demasiado caliente para tocarla”, dijo Rodríguez. “Así que me quité la camisa y la puse sobre la manija de la puerta. La primera vez que tratamos de sacarla del carro estaba demasiado caliente, pero le pedí a Dios ayuda y la segunda vez fuimos capaces de sacarla”.
Pérez y su familia asistieron a la ceremonia y entre lágrimas agradecieron a Sánchez y Rodríguez en repetidas ocasiones. Pérez aún tiene marcas de quemaduras en sus brazos y sufrió pérdida de la memoria.
“Sólo estoy agradecida de estar aquí”, dijo, secándose las lágrimas. “Si no fuera por ellos, no estaría viva en este momento con mi familia. Son muy afortunada de tener a estas dos personas”.
Aunque Sánchez y Rodríguez aceptaron gentilmente el reconocimiento, ellos insistieron que simplemente era cuestión de hacer lo correcto.
“No podía ver a esa persona quemarse en el vehículo. Tenía que actuar”, dijo Sánchez. “La vida es tan preciosa… Y ahora Denise puede despertarse cada día y ver a su familia”.
