La ciudad de Fontana se unió recientemente a la lucha estatal por recuperar los fondos provenientes de tarifas de licencias de vehículos desviadas en 2011 por la legislación de realineación de prisiones (SB 89), dinero que sería destinado a incrementar la seguridad pública local.
Por tal razón, las autoridades de Fontana, en conjunto con las nuevas ciudades Eastvale, Jurupa Valley, Menifee y Wildomar, en el Condado de Riverside, le exigen al gobernador Jerry Brown a que firme las propuestas de ley SB 69 y AB 1521, mismas que enmendarían el Código de Rentas e Impuestos de California.
Según Rod Jones, jefe de policía de Fontana, SB 89 significó la pérdida de 137 millones de dólares a 144 ciudades californianas, lo que “afectó negativamente a la seguridad pública de los residentes locales”.
Por tal motivo deben ser “restaurados de forma inmediata”, añadió Jones
Según Jones, la perdida de dichos fondos representó una afectación local de casi $1.4 millones, o el equivalente de $7.50 por cada residente. Estatalmente, la afectación promedio fue de $3.50 por residente, pero en Fontana, ciudad que recientemente anexó islas antes no incorporadas, fue el doble.
Jones añadió que en las cuatro nuevas ciudades del Condado de Riverside, el promedio de afectación fue de $50 por residente.
Acquanetta Warren, alcaldesa de Fontana, aseguró que dichos fondos podrían ser utilizados para contratar nuevos oficiales de seguridad, lo que ayudaría a disminuir el índice de criminalidad a nivel regional.
La propuesta de ley SB 69, de la autoría del senador Richard Roth, de Riverside, misma que restauraría dichos fondos a las municipalidades, fue aprobada por la Asamblea el 20 de agosto y por el Senado al día siguiente de manera unánime.
Por su parte, AB 1521, de la autoría de Steve Fox y copatrocinado por José Medina, representante del distrito 61 en el Condado de Riverside – misma que brindaría estabilidad fiscal a comunidades recientemente incorporadas y a ciudades que anexaron territorio – fue aprobada de manera unánime por ambas cámaras el pasado 20 y 22 de agosto pasado.
Ambas propuestas arribaron a la oficina del gobernador el pasado 26 de agosto. De ser decretadas, las leyes recibirían fondos económicos provenientes de las tarifas de licencias de vehículos basado en el número de sus habitantes.
El gobernador tiene hasta el 30 de septiembre para firmar o vetar alguna legislación en su posesión una vez que la Legislatura finalice la sesión el 31 de agosto. De no firmarlas, las propuestas se convertirían en ley automáticamente.
Eastvale se convirtió en ciudad el 1 de octubre de 2010 y según el censo de los Estados Unidos en 2013 contaba con una población de 55,191 residentes, de los cuales el 40 por ciento era de origen Hispano.
Por su parte, Jurupa Valley, considerada como la ciudad más joven de California, se incorporó al estado el 1 de julio de 2011. Jurupa Valley, la cual tiene un área de 43.5 millas cuadradas, cuenta con una población actual de 94,325 residentes, de los cuales el 49 por ciento son de origen Hispano.
Meniffe se convirtió en ciudad el 1 de octubre de 2008 y está ubicada en la zona suroeste del Condado de Riverside. Menifee incluye las comunidades de Sun City, Quail Valley, Paloma Valley y porciones de Romoland.
Menifee cuenta en la actualidad con aproximadamente 80,000 residentes, de los cuales el 33 por ciento son de origen Hispano.
Wildomar se convirtió en ciudad el 1 de julio de 2008 y es una de las ciudades más pequeñas del condado de Riverside con 23.7 millas cuadradas. En la actualidad Wildomar tiene una población de alrededor de 33,000 residentes, de los cuales el 35.3 por ciento son de origen Hispano.
Estas cuatro nuevas ciudades contratan los servicios del Departamento del Alguacil del Condado de Riverside para la seguridad pública; la aprobación de las leyes SB 69 y AB 1521 podría brindarles autonomía.
