Dos días después de ser nombrado en una demanda contra la ciudad, el alcalde de Murrieta, Harry Ramos, negó haber acosado sexualmente a una mujer de Ramona a principios de este año, calificando a las acusaciones como “mentiras fabricadas”.
“Nunca me avergonzaría a mí, a mi familia, o a mi ciudad haciendo lo que ella alega”, comentó Ramos el viernes 24 de julio, durante una entrevista personal después de una conferencia de prensa frente a la municipalidad.
Además, Ramos dijo que entregará información sobre sus compañeros del concejo y el administrador municipal a la Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Riverside. Él no detalló la naturaleza de la información o por qué los fiscales estarían interesados.
La aparición de Ramos se produjo un día después que su acusadora, Kathleen Smith, llevó a cabo su propia conferencia de prensa en la municipalidad donde dijo que Ramos la había sujetado y acercado a la fuerza después que ella aceptó su oferta para acompañarla a su vehículo tras una reunión de la Cámara de Comercio el 22 de enero.
Su abogado, Dan Gilleon, presentó una demanda legal contra la municipalidad y Ramos el miércoles.
La municipalidad dispone de 45 días para tomar acción sobre el alegato. Si es negado, Gilleon dijo que piensa presentar una demanda.
The Press-Enterprise típicamente no identifica a víctimas de ataque sexual pero Smith autorizó que su nombre e imagen fueran revelados.
Ramos no aceptó preguntas de los medios de comunicación durante la conferencia, la cual dividió en dos segmentos con un descanso de por medio.
En el primer segmento, Ramos se dirigió a las afirmaciones de Smith, diciendo que las “mentiras” lastimaban y hacían de menos a las víctimas de los verdaderos crímenes sexuales. Él también dijo que el “circo” mediático que rodeaba la presentación de los alegatos hacía más difícil que las personas reporten abuso y busquen justicia.
“Todas las personas asociadas con esta farsa deberían de avergonzarse”, agregó.
En la demanda, aparecen tres nombres como testigos, dijo. Uno de los nombres identificaba a la persona que conduce una investigación financiada por la municipalidad sobre Ramos por supuestas violaciones al código de conducta de Murrieta.
Smith dijo que decidió presentarse y contar su historia después de ser contactada por el investigador, quien estudia alegatos de abuso de poder y tráfico de influencias, entre otras cosas.
Ramos dijo que otros de los testigos en la lista están conectados con sus enemigos políticos y que él fue puesto en la mira por qué no está de acuerdo con “políticas de compadres”.
“Esto nunca sucedió”, dijo, pintándolo todo como “juegos y posturas políticas”.
El sargento de infantería de marina jubilado también cree que fue puesto en la mira debido a su origen étnico.
“Sus motivaciones son raciales”, comentó.
