LOS ANGELES – Chase Utley no es el primero en intentarlo. Pero tal vez es el primero en encontrar terreno fértil para sus esfuerzos.
Durante las Series Freeway de la pretemporada de los Dodgers en Anaheim, Utley se acercó a Yasiel Puig y le ofreció algunos consejos. Como Puig lo recuerda, Utley le ofreció algo de sabiduría que obtuvo al sobrevivir – y tener éxito – durante 14 temporadas en las Ligas Mayores y lo que se necesita “para llegar a su edad y aún ser un jugador eficaz”.
“Obviamente, todos sabemos cuánto talento tiene”, dijo Utley. “Ves a un tipo con tanto talento y quieres que sea capaz de sacarle el máximo provecho por el mayor tiempo posible. Así que aporté mi granito de arena y le dije cómo pensaba que podía sostener su éxito durante mucho tiempo”.
No hay secretos. Establece una rutina, le dijo Utley. Sé responsable. Está preparado cada día. “Llega aquí a tiempo y haz lo que sea necesario para ser un buen compañero de equipo”, resumió Puig. “Trabaja duro y haz las cosas”.
Puig lo había escuchado antes de un buen número de compañeros veteranos, entrenadores y otros. Y aun así, en una entrevista con ESPN Deportes durante la Serie del Caribe en febrero, Puig dijo que quería ser un buen compañero de equipo pero no sabía cómo.
El presidente de operaciones de los Dodgers, Andrew Friedman, leyó la entrevista y se mostró animado.
“Creo que muchas veces le dices a alguien, ‘sé un mejor compañero de equipo’. Pero no sé si ha habido seguimiento con detalles y ejemplos”, comentó Friedman. “Aún si ha sido bien explicado, podría no haber estado en el momento adecuado para escuchar e internalizarlo. No puedo responder a esa pregunta. Pero cuando lo escuché en febrero, eso me motivó por varias razones – una de ellas fue la vulnerabilidad que demostró. No es fácil decir que no sabe cómo hacer algo”.
Y no debe ser una sorpresa que Puig – y otros jugadores cubanos – no sepan inmediatamente lo que se espera de ellos como profesionales en las Ligas Mayores, agregó.
“Éste es solamente un pequeño ejemplo de una cuestión más grande – creo que como industria le hemos fallado a los jugadores cubanos”, comentó Friedman. “Les damos un contrato por mucho dinero y los ponemos rápidamente en las Ligas Mayores (por la cantidad invertida) enfocándonos en el talento bruto. No necesariamente tomamos el tiempo para ayudarlos a asimilarse con el estilo de juego, con la cultura.
Ahora que ya no es el joven de 22 años con talento bruto que estalló en las Ligas Mayores hace tres años y se apoderó del juego con su atletismo, Puig ha dicho que “no le importa ser regañado” o criticado por su comportamiento irresponsable fuera del campo de juego o lapsos de juicio. Pero ha dicho admitir que está motivado a cambiar.
“Sé que me estoy haciendo mayor, con más experiencia. Soy más maduro ahora”, dijo a través de un intérprete. “Y un contrato viene en camino. Sé que tengo que tener la disciplina para obtener uno mejor”.
En efecto. Podría llegar incluso antes de la próxima temporada. El contrato de siete años y 42 millones de dólares que Puig firmó en junio del 2012 incluye una cláusula que le permite optar por arbitraje cuando alcance los tres años de servicio en las Ligas Mayores. Él pasará ese punto esta temporada y podría usar la opción para llevar a los Dodgers a la mesa de negociaciones y obtener un nuevo contrato de varios años – o arbitraje, donde podría obtener un aumento a los 6.5 millones de dólares que espera ganar la próxima temporada.
La atmósfera en el club de los Dodgers ha mejorado – y eso en realidad tiene poco que ver con cualquier cambio en Puig. Empezó con la salida de Matt Kemp y Hanley Ramírez, cuyas metas individuales se habían hecho tóxicas. Y ha continuado esta temporada con la nueva energía traída por el nuevo director técnico Dave Roberts y nuevo cuerpo técnico.
La paciencia de Don Mattingly con Puig se agotó antes que el tiempo de Mattingly con los Dodgers y su relación se había deteriorado más allá del punto de reparación la temporada pasada. Roberts claramente ha sido un factor en el cambio que Puig ha experimentado esta temporada.
“No creo que tenga mucho que ver con eso. Obviamente, es el jugador el que tiene que hacerlo”, dijo Roberts, reconociendo que su acercamiento a Puig ha sido enfocarse en los aspectos positivos y reflejarlos de vuelta al jugador – algo que había abandonado al arsenal de Mattingly hace mucho tiempo.
“Pensé que en el fondo hay muchas cosas buenas”, dijo Roberts. Tuve la sensación de que tenías que quererlo un poco. Hemos hecho eso. Él ha sido grandioso. En realidad lo ha sido. Ha sido una alegría completa para mí”.
El hecho de que Puig batee .356 y que haya estado en base 23 veces durante los primeros 13 juegos de la temporada – y que pueda bromear al respecto con la hashtag de Twitter “#PuigNotLate” sobre ser el primero en el avión del equipo el lunes – ciertamente hace las cosas más fáciles para que Roberts lo acepte.
“Le doy mucho crédito a Dave, a (los entrenadores) Turner Ward, George Lombard – todos ellos han forjado una verdadera relación con él”, dijo Friedman. “Para crédito de Dave, él no ha tratado de cambiar a Puig. Él quiere que sea el mismo… Pero que a nivel individual entienda qué aspectos son más importantes que otros y dejarlo crecer dentro de esos límites más flexibles”.
Utley no parece ser una persona dispuesta a aceptar “límites más flexibles” sobre la forma apropiada de hacer las cosas en el campo de juego o en el club. Él había escuchado sobre el chico problema de los Dodgers antes de llegar a Los Ángeles el pasado agosto pero dijo que Puig “absolutamente” ha sido diferente de lo que esperaba.
“En realidad no sabía”, dijo. “Lees algo pero no quieres aceptar todo lo que lees. Siento que ha sido un buen compañero de equipo desde que llegué. Un buen compañero, alguien que apoya a los demás, que le importan las cosas, que juega duro”.
“Lees cosas que no eran necesariamente de esa manera. Pero lo que he visto ha sido bueno”.
