La prisión estadal en Norco se cerraría como parte de una renovación en el sistema de correccionales y que ahorraría a California 1,500 millones de dólares al año.
El Centro de Rehabilitación de California tiene 1,050 cargos autorizados con una nómina de 76.8 millones de dólares y aloja a 3,900 internos. El cerrarlo ahorraría al estado 160 millones de dólares al año en gastos de funcionamiento, dijeron las autoridades.
El amplio plan de reorganización a largo alcance también incluye detener la construcción de una prisión de 4,000 millones de dólares y delinea las recomendaciones del departamento para acabar con años de supervisión federal, el hacinamiento, el pobre tratamiento de las condiciones médicas y mentales de los internos y los presupuestos insuficientes.
En Norco, los funcionarios de la ciudad dijeron que no esperan que el cierre tenga un impacto importante en la ciudad o en el área. También destacaron que los rumores acerca del cierre de la prisión se han venido escuchando desde hace décadas. Los funcionarios de la prisión local fueron notificados hace unas semanas acerca del posible cierre y se les informó que el plan aún debe ser aprobado.
“No hay nada concreto acerca del cierre. He estado allí desde 1986 y desde entonces he estado escuchando que lo van a cerrar”, dijo el portavoz de la prisión Norman Faria.
Si se aprueba el plan, pasaría un año y medio antes de que los funcionarios comiencen a discutir sobre cómo llevar a cabo el cierre, dijo, y la clausura sería completada para el 2016.
Los cambios planificados son posibles debido a una ley del estado que entró en vigencia el primero de octubre y que muda a los delincuentes de bajo perfil de las prisiones estatales a las cárceles de los condados. Esta es la consecuencia principal de una orden de una corte federal que exige al estado reducir la población de sus prisiones.
El secretario de correccionales Matthew Cate dijo que explicó a los empleados de la prisión en Norco la razón para el cierre propuesto.
“Es nuestra prisión menos eficiente, mas costosa, menos segura y mas antigua”, dijo Cate en una conferencia de prensa en el capitolio del estado. “Es momento de cambiar las instalaciones que son tan costosas de mantener”.
La prisión de seguridad moderada abrió en 1928 como el hotel de lujo Lake Norconian Club y fue un hospital de la Marina de 1941 a 1957. El complejo se convirtió en un centro para tratamiento por narcóticos en 1962. Ha alojado a delincuentes de bajo perfil desde 1980.
El miembro de la asamblea estatal, Jeff Miller, republicano por Corona, cuyo distrito incluye a Norco, tiene una reunión programada con Cate. Miller dijo que quiere conocer los detalles del plan, pero hizo eco a los comentarios de Cate acerca del centro de rehabilitación.
“He recorrido estas instalaciones y me ha preocupado la seguridad del personal al igual que la de la comunidad que rodea la prisión”, dijo Miller en un correo electrónico. “Estoy contento de que el CDCR haya tomado en cuenta las preocupaciones de nuestros funcionarios locales y que hayan reconocido los problemas asociados con los internos que están a poca distancia de nuestros hogares”.
El concejal de Norco, Harvey Sullivan, dijo que las noticias no fueron exactamente una sorpresa. No espera un impacto importante inmediato o a largo plazo si la prisión cierra sus puertas; los negocios locales no dependen de los empleados de la prisión como una cantidad substancial de sus ventas, dijo.
“Ha tardado mucho tiempo en suceder”, dijo Sullivan.
Los funcionarios de Norco durante mucho tiempo habían expresado su interés en convertir el edificio de la histórica prisión y el lago que lo rodea en una atracción que lleve visitantes a la ciudad.
“Siempre he dicho que nunca seremos capaces de hacer nada con el hotel hasta que la prisión deje ese terreno vacío”, dijo.
En resumen, los recortes propuestos reducirían la nómina de los correccionales a 6,400 empleados para el 2016, dijeron los funcionarios. Casi 100 empleados se retiran o renuncian cada mes, dijeron.
Al disminuir la población de internos se elimina la necesidad de 4,100 millones de dólares en proyectos de construcción y eso permitiría que el Departamento de Correccionales y Rehabilitación del estado reduzca su presupuesto anual en 1,500 millones de dólares, dijeron los funcionarios.
El plan tiene como objetivo regresar a casi 9,500 internos a las prisiones estadales y quienes actualmente están internados en prisiones privadas en otros estados. Eso ahorraría al estado unos 318 millones de dólares al año.
Associated Press colaboró con este artículo.
