Más de 100 voluntarios de la iglesia Calvary se unieron en la calle Primera, el sábado pasado por la mañana, con un objetivo común: servir a las necesidades de la comunidad.
“La calle Primera es hogar de algunas de las personas más pobres y sufridas en el condado de Orange… queríamos pasar un día sirviendo a su gente”, dijo Lauren Parke, vocera para la iglesia.
El pastor Matt Doan habló de la importancia de servir y de tener un impacto positivo en la comunidad: “Nos preguntamos ¿si desapareciera la iglesia, alguien se daría cuenta?”.
El proyecto de servicio “A beautiful day on First street” (o en español “Un día bonito en la calle Primera”), ofreció almuerzo, productos de higiene, ropa y lavados de carros a los residentes del Motel Sunland, arreglar el Motel Da Vinci y llevar a los niños en acogida temporal al Zoológico de Santa Ana.
Se distribuyeron aproximadamente 1,000 libras de comida, la cual incluyó espagueti, arroz, mantequilla de maní, entre otras cosas.
La voluntaria María Higginbotham simpatizó con aquellos a quienes estaba sirviendo porque pudo relacionarse con ellos. “Hubo un momento cuando yo viví en moteles. (Pero ahora) podemos compartir comida y amor con la comunidad. Estamos trayéndoles una esperanza y mostrándoles que Dios quiere a todos”, dijo Higginbotham.
