El jueves, 27 de agosto, el Centro para las Artes Segerstrom dio a conocer un plan de $68 millones para ampliar sus programas, participación comunitaria, y la reconstrucción de su plaza central con espacios verdes, un escenario al aire libre y una cafetería.
El objetivo: crear una plaza pública para el condado de Orange.
“Esto está destinado a ser un lugar público atractivo para reunirse, con muchas comodidades que disfrutarán todas las audiencias”, dijo Terrence W. Dwyer, presidente de Segerstrom Center.
Con eventos comunitarios gratuitos en una plaza rediseñada y programas de participación comunitaria más extensos, tal como la actual asociación con el Hospital de Niños del Condado de Orange, la iniciativa también pretende llegar a grupos que tradicionalmente no han llegado al Centro Segerstrom, indicó.
La plaza en Costa Mesa será un centro de reunión para todo el condado, dijo Dwyer. “Queremos crear un espacio de reunión público que sea…atractivo para todas las diversas comunidades del condado de Orange”.
John Ginger, presidente de la junta directiva del Centro Segerstrom, dijo que la chispa inicial para el plan de tres partes comenzó hace dos años, cuando la junta directiva reflexionó sobre los cambios en la audiencia con vistas al futuro.
“Tenemos la visión de que sea algo así como la plaza de una ciudad que usted visitaría en Italia”, donde las personas se reúnen para hablar, escuchar música, comer y beber, y jugar, agregó.
“Creemos que mientras más personas conozcan el Centro Segerstrom —también podrán convertirse en nuestra audiencia en el futuro”, dijo Ginger.
UNA NUEVA PLAZA
A principios del 2016, se iniciarán los trabajos en la plaza central, entre el Segerstrom Hall y Judy Morr Theater por un lado, y el Renée y Henry Segerstrom Concert Hall y Samueli Theather por el otro. La plaza pasará a llamarse Julianne y George Argyros Plaza, el nombre de los clientes que han donado la mayor cantidad para el proyecto hasta el momento, $13.5 millones.
Los planes incluyen un escenario al aire libre a lo largo del lado sur del Segerstrom Hall para actuaciones y eventos comunitarios, desde conciertos gratuitos a ceremonias de graduación de la universidad.
Actualmente, la plaza es la ubicación de alrededor de media docena de eventos gratuitos al año, incluyendo las tan populares películas de cine al aire libre, explicó Dwyer. Con la nueva plaza, el centro planea organizar eventos al aire libre, al menos, 30 fines de semana al año, como una serie de jazz y actuaciones de bandas musicales del sur de California. Los detalles de la programación aún no están detallados, dijo Ginger. Se espera que los trabajos de construcción en la plaza estén terminados para el otoño del 2016.
Alrededor del escenario de la plaza se ubicarán tres espacios verdes separados, con la sombra de árboles de pera, áreas para sentarse y senderos para caminar. Una gran escalera circular unirá el mezzanine del Segerstrom Hall al nivel de la plaza de abajo y terminará en una cafetería con mesas al aire libre.
Michael Maltzan es el arquitecto del rediseño de la plaza y el Centro de Danza e Innovación. Su empresa, con sede en Los Ángeles, ha trabajado en varios otros proyectos públicos en los centros culturales, incluido el patio central y café en el Museo Hammer de UCLA.
“La plaza muy a menudo se percibe como demasiado grande y crea un espacio que no creo que tenga el mismo nivel de accesibilidad y la vitalidad que los interiores de los edificios adyacentes tienen”, dijo Maltzan.
El escenario al aire libre en la Plaza Julianne y George Argyros unirá el espacio abierto y creará una “escala más humana”, dijo Maltzan, mientras que los espacios verdes y los árboles darán sombra y mitigarán el efecto de los vientos por la tarde.
La plaza será un espacio multiusos que permitirá que se lleven a cabo grandes eventos en el escenario comunitario, y a la misma vez proveerá espacios verdes más pequeños donde los visitantes podrían llegar con sus hijo o sentarse en el césped con una taza de café. La cafetería “será diseñado para ampliar la actividad en la plaza”, agregó Maltzan, esperaros atraer a personas durante su tiempo de almuerzo y animándoles a quedarse después de las actuaciones nocturnas.
Hasta el momento, el Centro Segerstrom ha recaudado $42 millones de la meta de $68 millones en su recaudación de fondos, con el nombre de “El siguiente acto”. La meta de la recaudación de fondos debe cumplirse para cuando finalice la construcción, dijo Ginger.
Dwyer indicó que el costo de la nueva construcción y programas bajo la iniciativa es de aproximadamente $14 millones, y los restantes $54 millones pagarán por los espacios ya existentes, entre ellos Renée and Henry Segerstrom Concert Hall.
El Museo de Arte del Condado de Orange (OCMA), actualmente escondido en un rincón, fuera de la vista desde la vía pública, cerca de Fashion Island, tiene planes de mudarse finalmente al Centro Segerstrom. Los planes de Segerstrom no se verán afectados por esto, dijo Dwyer. El museo OCMA todavía tiene un lugar reservado en el campus de Segerstrom, al este de la sala de conciertos y colindante a la plaza rediseñada.
Tanto Ginger como Dwyer observaron los cambios en la demografía del condado de Orange en las últimas décadas e indicaron que el Centro Segerstrom intenta acercarse a los recién llegados.
“Esperamos atraer, sin duda, un público de base más amplio del condado”, dijo. “Nuestro plan es incluir a todo el mundo”.
Dwyer concordó con que “a veces existen barreras económicas para la gente más joven” para que asistan a programas de artes. Algunas comunidades podrían tener una menor exposición o menor tradición de asistir a las artes escénicas del oeste o Broadway.
“Cada persona con la que tengamos contacto en esta forma será parte de nuestra audiencia. Nuestro público no abarca sólo a las personas que compran boletos para algún evento”.
