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De izq. a der: las colombianas Sandra Sarmiento, Sara Quintero y Cristina Cárdenas vivieron un retiro espiritual el fin de semana previo a la Semana Santa.
De izq. a der: las colombianas Sandra Sarmiento, Sara Quintero y Cristina Cárdenas vivieron un retiro espiritual el fin de semana previo a la Semana Santa.
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Muchos añoran las tradiciones en su país; autoridades se preocupan por quienes fallecen en las carreteras

Aunque la Semana Santa representa los momentos más intensos del año litúrgico, en los que se ora y reflexiona sobre la Pasión y Muerte de Cristo, para miles de católicos y cristianos de otras denominaciones este tiempo se ha convertido solamente en una ocasión de descanso, diversión y de riesgos en las autopistas.

En Semana Santa, miles de personas viajaran  a las playas y lugares paradisiacos como las de Baja California, México, Ensenada, Rosarito o Los Cabos.

Y otros redoblarán su fe en un tiempo considerado de devoción y oración.

“Nosotros íbamos a procesiones, misas y eventos en la catedral o dependiendo del calendario de actividades de cada parroquia”, recordó Cristina Cárdenas, nacida en Armenia, Colombia. “En estos días no se prendía la radio, ni la televisión ni nada de música; todo mundo iba a la confesión y a las misas, pero hoy todo mundo se va de parranda y no respeta nada”.

La Semana Mayor, como se denomina sus días santos comienza el Domingo de Ramos, que esta vez se celebra este 9 de abril y concluye el Domingo de Pascua, el próximo 16.

“Muchos dicen que Dios existe, pero no tienen a Cristo en el centro de sus vidas”, comentó Delia Focil, de Guayaquil, Ecuador. “La gente ha dejado de saber el verdadero significado de la Semana Santa”.

VIA CRUCIS Y DEVOCIÓN

Martin Valdivia, oriundo de León, Guanajuato, dijo que ha inculcado a sus hijos nacidos en este país presenciar el Viacrucis y meditar en el sentido de la muerte de Jesús por la humanidad.

“Hace más de 2,000 años fue la última semana de Cristo en la tierra”, dijo. “Y su Resurrección nos recuerda que fuimos creados para vivir eternamente junto a Dios; esa es la educación que le doy a mis hijos”.

Rossana Blackburn, dijo que, en su natal Chiquimula, Guatemala, era costumbre comenzar la celebración de Semana Santa con el Domingo de Palmas y procesiones durante toda la semana, visita a los enfermos y las cárceles, la Santa Cena en la iglesia, ayuno y silencio el Viernes Santo.

ÉPOCA DE VIAJE

Pero también las autoridades saben que esta época no solo es de celebraciones religiosas, sino también de paseos y de viajes, por eso hacen la advertencia de costumbre.

“Todos deberían planear el tiempo de viaje a donde se dirijan y esperar algunos retrasos”, comentó Fran Clader, directora de comunicaciones de la Patrulla de Caminos de California (CHP). “Cada quien debe conocer la ruta, llevar un equipo de emergencia y, sobre todo, que el automóvil se encuentre en buenas condiciones mecánicas”.

Los sur californianos viajarían sin que les importe el costo de los precios del galón de gasolina, cuyo promedio ya ha rebasado los $3 dólares en esta primavera en los condados de Los Ángeles y Orange.

El precio de la gasolina es medio centavo menos que hace un mes, pero 13 centavos más que el año pasado, según indicó Jeffrey Spring, portavoz del Club de Automovilistas del Sur de California (AAA).

“Los precios al mayoreo en estantes de Los Ángeles han caído 20 a 25 centavos en las últimas tres semanas a partir de sus puntos altos récord para el año, por lo podría suceder una disminución de los precios”, indicó Spring. “Hemos visto caer los precios del petróleo dramáticamente a medida que la producción nacional se ha aumentado, aunque los precios se han recuperado un poco en los últimos días”.

REFUERZAN PATRULLAJES

Para evitar muertes en las carreteras autoridades de la Patrulla de Caminos de California (CHP) estarán alertas el fin de semana feriado, especialmente para vigilar a los conductores que transiten la carretera interestatal 15 (I-15) de Los Ángeles a Las Vegas.

La vigilancia se enfocará en quienes se encuentren en el volante bajo los efectos del alcohol o drogas, porque cada día, un promedio de 28 personas muere en Estados Unidos en choques de vehículos, es decir, una muerte cada 53 minutos.

Según la Administración Nacional de Seguridad en el Tráfico en las Carreteras, aunque el número de fatalidades se ha reducido un tercio en las últimas tres décadas.

Sin embargo, la posibilidad de involucrarse en un accidente donde hay la presencia de alcohol es aún representa una en tres a lo largo de toda la vida de una persona. Estas muertes y daños contribuyen a un costo de $ 52,000 millones anuales.

“Aumentaremos el patrullaje”, dijo el agente Ryan Cámara. “Vamos a estar revisando que nadie exceda los límites de velocidad, y a ayudar a las unidades que trabajan en el camino”.

La coordinación de CHP será en conjunto con sus homólogos del vecino estado de Nevada, a donde se interna diariamente un promedio de 45,000 vehículos procedentes de California, a través de la I-15.

“Conductores y motociclistas tienen la responsabilidad de compartir el camino y crear condiciones de seguridad”, expuso el comisionado de CHP, Joe Farrow. “Los conductores deben estar alertas de los motociclistas que podrían estar más cerca de lo que parece y los motociclistas siempre deberían manejar a la defensiva”.