El Departamento de Vehículos Motorizados de California dio un paso gigante al siglo XXI con el debut de una versión automatizada de pantalla táctil del examen escrito para solicitar licencia de conducir.
La prueba con pantalla táctil, que sustituyen al examen tradicional con lápiz y papel, se puso en marcha en las oficinas del DMV a partir del 16 de julio, informó la portavoz del DMV, Jessica González.
Ahora está disponible en 120 oficinas en todo el estado, incluyendo las oficinas del DMV en el área del Inland en el este de Riverside, Norco, Palm Desert y San Bernardino.
También está disponible en Rancho Cucamonga y Victorville.
Gonzáles indicó que el sistema de pantalla táctil acorta el tiempo para tomar la prueba y reduce el fraude mediante la presentación de preguntas y respuestas en el examen en orden aleatorio.
Las personas que presentan las pruebas son guiadas a través del proceso y se enteran de inmediato si respondieron incorrectamente a una pregunta.
Las pruebas reciben una calificación de forma automática, a diferencia de la prueba de papel, que era calificada a mano.
La implementación del sistema de pantalla táctil empezó hace cinco o siete años, pero se retrasó debido a los problemas presupuestarios del estado, informó González.
“Nos dieron la autorización para continuar hace unos dos años, y empezamos a instalar este verano”, dijo González.
González indicó que el costo total del proyecto es de $8.7 millones y hasta ahora han gastado casi $4.4 millones.
Agregó que el registro de garantías y la instalación tuvo un costo de $2.6 millones Indicó que los subsidios federales pagaron la mayor parte del sistema.
Gonzáles dijo que los administradores informan que los usuarios de la tercera edad están reaccionando al nuevo sistema con aprensión, pero se relajan cuando se les explica que el sistema es similar a la tecnología de pantalla táctil que se utiliza en los casinos.
“Se les va el miedo”, dijo González.
“Los clientes dicen que es fácil de entender y usar”, explicó González.
Esa fue la opinión de George Nino, de 16 años, residente de Corona y quien rindió la prueba por primera vez.
