REGION – Fiscales federales pasarán el verano preparando un caso contra cinco profesionales médicos acusados de una estafa masiva de Oxycotin que cubre los condados de Los Angeles, Orange y San Bernardino.
Los cinco acusados, en su mayoría farmaceutas, fueron atrapados por la operación Dirty Lake (lago sucio), una investigación estatal y federal que culminó hace dos años con el procesamiento de 20 personas que presuntamente habían transferido 900,000 píldoras del poderoso analgésico.
Catorce de los acusados se declararon culpables y han sido sentenciados o esperan ser sentenciados. Uno de ellos, Ashot Sanamian, se dio a la fuga y aún no ha sido capturado.
Camino al juicio se encuentra el asistente de médico, David Garrison; la asistente de médico sin licencia, Eliza Budogova; así como también los propietarios de farmacias, Theodore Yoon, Phic Lim y Perry Tan Nguyen, todos los cuales operaban farmacias en el área de los tres condados.
De acuerdo a un resumen de la fiscalía presentado en el caso, y obtenido por Orange County Register, los acusados eran parte de una operación que defraudó a Medicare y Medi-Cal por $2.7 millones de dólares en reembolsos por Oxycotin y $4.6 millones de dólares por procedimientos médicos que no eran necesarios o nunca fueron practicados.
El supuesto plan empezó en el 2008, cuando los acusados Mike Mikaelian y Ankelica Sanamian, quienes no cuentan con formación o entrenamiento médico, establecieron una clínica para el tratamiento del dolor llamada Lake Medical Group en Los Angeles. La clínica, la cual se mudó dos veces, se convirtió en un “molino de píldoras”, de acuerdo a un escrito judicial.
La operación empleaba a reclutadores para enlistar a pacientes en Medicare y Medi-Cal a que llegaran a la clínica y recibían tratamientos falsos así como también recetas de Oxycotin. Los “pacientes” eran luego acompañados por los reclutadores para recibir las recetas surtidas en ciertas farmacias. Algunas de esas farmacias presentaron facturas a Medicare y Medi-Cal, según documentos de corte.
Cuando Medicare y Medi-Cal empezaron a negar las facturas, las farmacias cambiaron a un sistema en efectivo más rentable, cobrando casi 1,200 dólares por botella, de acuerdo al informe.
Una vez que eran obtenidas por los pacientes, las píldoras de Oxycotin eran entregadas a los reclutadores, quienes luego se las llevaban a Mikaelian para vender en la calle, por hasta 27 dólares por píldora, según el informe. Las recetas eran típicamente para píldoras de 80 mg, las más fuertes disponibles, según una acusación enmendada.
Para lidiar con las grandes cantidades de efectivo generadas de las ventas ilegales de Oxycotin, algunos de los acusados supuestamente realizaron depósitos de banco en cantidades menores a $10,000 dólares para evadir los requisitos de informes bancarios.
Otros acusados utilizaron ganancias producto de la venta de Oxycotin para apostar en casinos o para comprar automóviles y joyas – o para comprar más Oxycotin.
Según la acusación, Mikaelian usó más de $31,300 dólares en un día en una máquina tragamonedas en el Casino San Manuel en Highland. Otro día, gastó $24,820 dólares en las máquinas tragamonedas. Mikaelian se declaró culpable de conspiración y espera ser sentenciado.
Documentos de corte indican que Garrison era un asistente médico contratado para “tratar” a los pacientes. Budogova, aunque fue contratada como asistente médica, en realidad era una antigua paciente quien dijo haber sido doctora en Armenia y trabajaba en la clínica como voluntaria, de acuerdo a un breve de la fiscalía.
Yoon era copropietario de Gemmel Pharmacies en Rancho Cucamonga, Ontario y Los Angeles, así como también propietario de Better Value Pharmacy en West Covina. Lim era propietario en Gemmel Pharmacies, según la acusación.
Nguyen era propietario de la Farmacia St. Paul en Huntington Park.
Yoon algunas veces iba a la clínica para recoger los pagos en efectivo, los cuales, según comunicaciones electrónicas, algunas veces excedían $20,000 dólares en un solo día. Para ocultar las ganancias ilegales de la venta de Oxycotin, el acusado Yoon lavaba el dinero a través de cuentas de banco de la farmacia.
Los fiscales dijeron que Yoon, Lim y Nguyen representaban más de la mitad de las casi un millón de píldoras que fueron obtenidas.
La operación Dirty Lake fue llevada a cabo por el FBI, la DEA y el Departamento del Alguacil del Condado de Los Angeles, así como también otras agencias.
El juicio fue fijado para iniciar el martes en la Sala de Corte de los Estados Unidos en el centro de Los Angeles pero fue transferido al 23 de septiembre, según Lana Owens, asistente del fiscal.
