Expresiones raciales con insultos y maltratos son presuntamente parte del trato diario que reciben indigentes latinos o mexicanos por parte de otros desamparados y de parte de los “guardias” de seguridad de Midnight Mission a cargo del refugio temporal “The Courtyard” en Santa Ana, alegan algunos demandantes entrevistados por Excelsior.
Insultos como “¡Púdranse espaldas mojadas, ustedes no tienen derechos aquí!”, “¡váyanse! latinos sucios y apestosos!” son recibidos presuntamente en este lugar creado para combatir la indigencia en el centro cívico de esta ciudad.
“Pedimos de la manera más atenta a la autoridad que le dé cumplimiento a lo que se llama igualdad… y que paren el racismo y poco profesionalismo de los guardias”, dice una carta enviada a las autoridades y cuya copia fue entregada a este medio.
Las autoridades del condado reconocieron por su parte que debido al número de personas que buscan refugio, “seguramente habrá casos aislados de quejas o problemas”.
Sin embargo, señalan que “el condado y Midnight Mission están trabajando diligentemente para tratar la regeneración proporcionada y para responder con eficacia… El Condado registra cada queja seriamente y trabajará para asegurar el más alto nivel de profesionalidad de nuestro operador”.
Geeorgia Berkovich, representante de asuntos públicos y gubernamentales de Midnight Mission indicó que los acontecimientos denunciados por los indigentes “no reflejan los valores del trabajo que se realiza en las instalaciones”.
Las quejas
Algunos indigentes latinos acusaron al personal de seguridad de The Midnight Mission de dar trato preferencial a “su gente” y, en cualquier hora del servicio de comidas, se les obliga a colocarse al final de la fila.
“Aunque estemos formados siempre nos avientan hasta atrás”, dijo “Julio Pérez” (nombre ficticio por razones de seguridad), oriundo de Puebla, México. “A mí me dijeron que me callara la p**ta boca, porque no tienes ningún derecho de estar aquí”.
Habilitado como refugio temporal hace dos meses y administrado por personal de The Midnight Mission, en el sitio se atiende diariamente a más de 200 indigentes, de los aproximadamente 450 que pernoctan en “El patio”.
“Ahí, el pasado 6 de noviembre un guardia arrojó al piso a una persona discapacitada”, denunció Igmar Rodas, un salvadoreño que ha sido miembro de la comunidad sin hogar y es cofundador de la Mesa Redonda del Centro Cívico, un grupo que aboga por los derechos de los desamparados.
“El señor estaba durmiendo sobre cuatro colchonetas porque está enfermo de la espalda”, narró. “El ‘security’ llegó, lo cuestionó porque tenía más colchonetas que otros, las jalo y lo mandó al piso…el señor ahora está más lesionado”
“La cosa es seria”, agregó Rodas. “A mí, los ‘mexicanos’ me entregaron una carta donde describieron las actitudes racistas de los guardias de seguridad”.
“Juan Carlos Morales”, indigente desde junio pasado, dice que si bien el ambiente de violencia y racismo en The Courtyard es difícil, más lo es cuando los “guardias” los “ven mal” y les llaman “latinos apestosos”.
“Aquí, cada noche hay que jugarse la vida “, dijo. “A mí no me han golpeado porque no me he dejado; ellos dicen que según eso los negros y blancos tienen más derechos que nosotros porque han estado aquí más tiempo…y todo lo malo que pueda haber aquí está, desde drogadicción a prostitución; las autoridades lo saben, pero no hacen nada”.
Por su parte, “José Luis Hernández”, de Guadalajara, Jalisco, observó: “Yo tengo dos años de vivir en la calle y me da pena que a mis 50 años no me quieran dar trabajo, pero lo más feo es que estas personas lo humillan a uno más que si fuera un criminal…siempre tratan de hacerte menos”.
“Casos aislados”, responden las autoridades
Cuestionadas las autoridades en torno a específicos actos de maltrato físico y verbal en el interior de The Courtyard; de presuntos actos de discriminación contra indigentes latinos o actos sexuales y presunta compra-venta de drogas que suceden bajo la supuesta “complacencia” de los guardias, Cymantha Atkinson, directora de relaciones comunitarias y gubernamentales del Condado de Orange respondió:
“El Patio ofrece refugio para aquellos que no tienen vivienda permanente y que han estado viviendo en el Centro Cívico del Condado de Orange.
El condado eligió Midnight Mission para operar este refugio de transición debido a su contrato acertado con una población crónica de personales de la calle y su gerencia de una operación similar en Los Ángeles”.
Agregó que “Midnight Mission tiene un proceso para aquellos que se quejan, -desde actividades que ocurren en El Patio hasta [por] acciones de miembros de su personal de seguridad- para que presenten quejas por escrito que son revisadas y sobre las que se actúa”.
Añadió que: “Los comentarios de los residentes de The Courtyard se han incorporado al desarrollo del diseño del programa durante sus primeros 45 días de operaciones”.
No han recibido reportes
Por su parte, Geeorgia Berkovich, representante de asuntos públicos y gubernamentales de Midnight Mission aseguró queellos no ha recibido reportes escritos de quejas.
“Nuestra misión es auxiliar a 400 indigentes que duermen cada noche [en The Courtyard], a quienes se les proporcionan servicios sin importar la raza o género”, dijo. “No hemos recibido reportes de abusos; el personal de seguridad está ahí para vigilar el ambiente, no para ejercer la aplicación de la ley; ellos no son agentes de la policía”.
Asimismo, precisó que en la última semana de noviembre un guardia fue atacado por un desamparado y sufrió la fractura de una pierna y se encuentra ausente de su trabajo, con licencia administrativa.
