El reto más grande para Eduardo Yáñez al hacer a Santiago Guzmán en “Ladrones” fue evitar caer en el sarcasmo o la pedantería.
“Tratando de hacer comedia, puedes caer en lo pesado”, dice Yañez. “Pero estaba muy bien escrito el libreto y la dirección de Joe Menéndez — creo que nos ayudó a todos para conservar muy bien el nivel de comedia, no rayando en la payasada y yo creo que así le llegó más al público de una manera bastante ligera”.
Si no pudo ir al cine a ver “Ladrones”, ahora tiene la oportunidad de disfrutar de esta historia protagonizada también por Fernando Colunga, gracias al lanzamiento del DVD.
Yañez opina que — aunque es un tema “un poquito peligroso, porque no debe servir de ejemplo para nadie — sí es un buen pretexto para crear estos Robin Hood”.
”Ladrones relata la historia de un grupo de campesinos tejanos que poseen unos títulos de hace más de 100 años, cuando Texas fue vendida a Estados Unidos; Yáñez y Colunga encabezan la misión de rescatar esos predios, muy al estilo del épico ladrón que robaba a los ricos para dárselo a los pobres.
Yáñez considera que el mercado se está inundando de muchas películas sobre el tema del narcotráfico y la violencia, por eso hacen falta más películas familiares como “Ladrones”.
“Si nos transportamos un poco a los años del cine de oro de México, todos los comediantes no usaban malas palabras, no había sexo, no había violencia sangrienta en sus temas, eran comediantes muy limpios”, dice Yañez. “Ya Eugenio Derbez nos ha probado que es una buena fórmula volver a eso, y “Ladrones” como que viene a acentuar que el latino tiene que ser un héroe de su comunidad, no tiene por qué ser siempre el malo, el narcotraficante”.
Asegura que “sí está proliferando mucho ese tema del latino que se retrata como una basura de la sociedad y nosotros con Ladrones, quisimos salir a limpiar un poquito eso, porque los latinos, sobre todo en un país extranjero como Estados Unidos, merecemos ser vistos desde otro punto de vista, casi el norteamericano por las noticias que llegan acá, no tiene otra opción más que ver la cosa roja y negativa”.
Sobre el abuso que viven muchos latinos en suelo americano, dice que “todos nos podemos quejar de lo que puede suceder acá, pero si nos vamos a nuestra frontera allá en el sur de México, también suceden las mismas injusticias con la gente que viene subiendo de más abajo, yo no podría hablar de este país como el exclusivo donde suceden estas cosas aberrantes en contra de los latinos, en todos los países se cuecen habas y en todos los países se cometen este tipo de injusticias”.
Eduardo prefiere concentrarse en el lado positivo, “porque pues sí podemos venir a este país a buscar oportunidades y muchos lo han logrado, muchos ya tienen a sus hijos en la escuela, recibiéndose de una carrera, podríamos hablar del lado positivo y no sólo del lado negativo, también nuestro país tiene problemas de delincuencia tan altos como los hay aquí en Estados Unidos”.
Como ejemplo, menciona el caso de su hijo, quien “tuvo oportunidad de ir a la escuela, ellos son los que van a marcar la diferencia, porque más adelante no va a estar permitido el abuso a ninguna persona, porque un chavo que está preparado obviamente es más difícil que abusen de él con cualquier medio, con cualquier mentira, con cualquier manipulación”.
De trabajar junto a Colunga, Yáñez dice que fue “Muy agradable. Fernando es un chavo súper profesional, un actor que quiere mucho su trabajo, se dedica profundo a él, no anda jugando con el tiempo de él ni con el de los demás, es un chavo que como muchos otros actores, amamos nuestra carrera y buscamos lo mismo, superación personal, mejorar cada vez”.
Además, dice que ambos embonaron perfecto en sus personajes.
“Nuestras características como personas, nuestros diferentes caracteres es casi casi lo opuesto uno del otro”, dice Yañez. “Eso nos hizo tener mucha química, porque es muy chistoso estarlo molestando y reírnos los dos de las bromas también que me hacía a mí y yo a él. Yo creo que eso también ayudó mucho a la película, la química, pero creo que como actores buscamos lo mismo, lo mejor para que el público se divierta”.
Por otra parte, Eduardo comenta que lejos de afectar el que haya más producciones con canales de paga y por Internet, es una ventaja para todos los artistas.
“Las oportunidades que se han abierto para el público casi se vuelven infinitas, lo mismo sucede para el actor, hay muchos proyectos en los que se puede dejar ver; cuando sólo existe una sola compañía es muy difícil que un actor pueda tener expansión y cuando existen muchas más, pues todos tienen oportunidad de trabajar, existe un pedazo de tiempo y de trabajo para todos”.
Considera que la competencia los obliga a hacer una mejor programación, “a los actores estar más al tiro con nuestros trabajos, los proyectos que nos ofrezcan y nuestra preparación en cada personaje porque también el público se ha vuelto más exigente por lo mismo de la variedad de posibilidades que tienen, entonces está en nosotros mismos dejar atrapado al público con la calidad de nuestro trabajo”.
“A mí me parece que es muy bueno en el sentido de que nos obliga a ponernos las pilas y ofrecer un mejor trabajo al público, eso (de la competencia) es buenísimo, me parece positivo”, agrega.
Antes de despedirse de sus seguidores del sur de California, Yáñez recuerda que lo que más le gusta de venir a esta parte del país es “precisamente la gente, que aquí no se pierde el sabor de nuestra gente latina y a donde quiera que vas, siempre encuentras a un cuate que te reconoce, un latino que te habla padre y el trato y la ayuda entre nosotros es muy bueno”.
Destaca que “todos estamos aquí con el mismo propósito de superarnos y no nos olvidemos de alguna forma que éste no es nuestro país de origen y tenemos que echarle más ganas que otros”.
Concluye que se siente “muy agradecido con la gente que siempre ha apoyado mi carrera, ahora viene Ladrones en DVD y pues no pierdan la oportunidad de tenerlo en su casa para que se rían las veces que quieran, o nos critiquen o nos acierten las veces que quieran”.
