La magia de la Navidad está por todos lados y su espíritu puede evocarse y sentirse en cada rincón y en cada decoración de esta época en grandes centros comerciales de los condados de Orange y Los Ángeles como South Coast Plaza, The Irvine Spectrum Center, Knott’s Berry Farm, las ciudades de Fashion Island, Beverly Hills, LA Live! e incluso en el árbol que adorna la habitación de las hijas del presidente Barack Obama, en la Casa Blanca.
Detrás de todas esas grandes decoraciones navideñas está la magia y la visión de un latino: Jeff López, presidente y propietario de la compañía Dekra-Lite Industries, Inc., ubicada en Santa Ana., cuyos abuelos paternos emigraron desde Chihuahua, México, y de West Virginia, por el lado materno. Su empresa genera ventas anuales por 20 millones de dólares.
Las enormes coronas de Navidad, esas roscas variopintas que cuelgan a la puerta de entrada de grandes centros comerciales y adornos de la temporada como en South Coast Plaza de Costa Mesa, Disneylandia, Universal Studios o Six Flags Magic Mountain son fruto también del esfuerzo de sus 65 empleados de tiempo completo y del total de 240 que trabajan a contrarreloj previo a la temporada navideña.
“Por fortuna me rodeé de gente muy talentosa que me ayudaron a que crecieran mis habilidades para la decoración, aunque yo soy experto en cuestiones de organización”, señala López.
El arte expresado por empleados latinos
“Como todos, yo comencé limpiando pisos y decorando y llevo dos años dirigiendo la bodega” contó Jorge Sánchez, inmigrante oriundo de Uruapan, Michoacán y actual gerente de producción. “Ya llevo 21 años y he tenido la oportunidad de aprender a ser mejor trabajador”. Sánchez supervisa a al menos 60 trabajadores, a quienes les exige profesionalismo en cada tarea asignada para cumplir con los deseos de cada cliente.
De noche o madrugada, todos los trabajadores de Dekra-Lite se mueven como magos en los centros comerciales, encadenando luces y erigiendo enormes árboles de Navidad.
Y mientras las ciudades duermen, ellos están despiertos para provocar la magia y entusiasmo que la gente admira en época de vacaciones, y, en particular, cuando los centros comerciales buscan atraer a la mayor cantidad de clientes y potenciales compradores.
“Se ve mucho empeño y mucho trabajo en todo este arte”, valoró César Cárcamo, residente de Santa Ana, quien llevó a su hijo Steven a admirar el tren eléctrico que transita por las vías del carrusel de renos de Santa Claus, en South Coast Plaza. “La verdad es que se aventaron un 10 con estas decoraciones”.
Una historia de éxito
A los 31 años de edad, López, dueño de Dekra-Lite, decidió que la decoración profesional era su destino y en 1987 abrió el negocio porque “solamente quería trabajar tres meses al año” y relajarse el resto del tiempo.
Su esfuerzo comenzó rendir frutos en 1990, tres años después de que López concretó su primera asignación de un centro comercial para colocar las luces de Navidad y una cabaña de Santa Claus para MainPlace / Santa Ana.
“Con el paso de los años aprendí de la gente que trabajaba conmigo como vendedores”, recordó el exitoso hombre latino de 59 años.
Enormes bolas de cristal o de plástico como esferas, salpicadas de luces multicolores embellecen los pasillos entremezcladas en gigantes guirnaldas que embellecen los techos blancos y brillantes.
“Yo viajo frecuentemente por el mundo y en cada parte encuentro ideas que nos pueden servir para nuestra compañía”, dijo López. “Muchos materiales los traemos de India, China, México y Europa”.
Para López, el prestigio ganado a pulso por su negocio le ha llevado a ser considerado como el mejor decorador más importante al Oeste de las Montañas Rocosas.
De hecho, Dekra-Lite tiene contratos durante los días festivos de diciembre con 50 ciudades y más de 400 centros comerciales.
Experimentar Navidad todo el año
Dulce Díaz, una empleada de la compañía nacida en Acapulco, Guerrero, comenzó en Dekra-Lite en el departamento de operaciones; luego pasó a ser recepcionista y ha escalado a ser asistente administrativa.
“El señor López tiene un gran corazón y aquí vivimos la Navidad todo el año”, dijo Dulce. “Todos los que trabajamos aquí ya somos también dueños de la empresa”. Jeff López vendió a sus empleados el 50% de las acciones para que, cuando él ya no esté, ellos puedan continuar su legado.
Por su parte, Nicole Cintrón, directora creativa expresó que el objetivo de Dekra-Lite no es simplemente decorar, “sino encantar a todos en este negocio de hacer magia”.
Y, en efecto, Jeff López comenzó a hacer “magia”, años después que su madre obtuvo una segunda hipoteca de su casa para prestarle $40,000. Más tarde, su hermana le prestó otros $30,000, logrando su primera cuenta en una tienda de flores Conroy, seguida por un par de tiendas d comida rápida Weinerschnitzels y alguno que otro restaurante, hasta que llegó el contrato de Main Place/Santa Ana.
“Somos únicos y diferentes; eso es lo que nos distingue”, concluyó López. “Es que en este lugar siempre tenemos la alegría de la Navidad”.
