Una investigación interna está en marcha, después de que se descubrieron a dos jóvenes teniendo relaciones sexuales en una habitación dentro de una unidad unisex
Las niñas están regularmente alojadas junto a los niños en el Juvenile Hall del condado de Orange, lo que lo convierte en un albergue mixto, único en su tipo en el sur de California.
La práctica supuso un problema para el Departamento de Libertad Condicional del condado de Orange -que supervisa el centro de detención juvenil- el 12 de febrero, cuando los agentes descubrieron a una niña y un niño de 17 años de edad teniendo relaciones sexuales en una habitación en una de las unidades mixtas.
Steve Sentman, oficial en jefe de libertad condicional, dijo que una investigación interna está en curso sobre las políticas de seguridad y departamentales, incluyendo la colocación de las chicas en las unidades que albergan en su mayoría a hombres.
Las niñas representan sólo un pequeño porcentaje de la población del Juvenile Hall, y funcionarios de libertad condicional dijeron que no cuentan con la mano de obra para abrir un ala sólo para chicas.
Hay 348 menores en este centro de detención juvenil. De ellos, 29 son niñas.
En el Juvenile Hall del condado de Orange, el departamento tiene un presupuesto para utilizar 380 de las 434 camas disponibles. Como sólo hay una unidad para las niñas de 20 camas, eso significa que las niñas con los delitos más graves -y las que necesitan atención médica- se encuentran en las alas especializadas, donde la mayoría de la población es masculina.
Cada unidad o ala, cuenta con habitaciones individuales que pueden albergar uno o dos menores de edad del mismo sexo. En las unidades mixtas, menores de edad del sexo opuesto no comparten una habitación individual, pero sí comparten un área común.
Funcionarios del Departamento de Libertad Condicional dijeron que tratan de separar a los menores de edad por sexo, sin embargo, carecen de recursos para separar a las niñas que necesitan atención médica adicional o una mayor seguridad en sus propias áreas.
Eso hace que el condado de Orange sea el único condado en el área que tiene a los reclusos menores de edad viviendo en unidades mixtas en el centro de detención juvenil.
El Orange County Register habló con los directivos de los condados vecinos: Los Ángeles, San Diego, San Bernardino y Riverside, quienes dijeron que no cuentan con unidades mixtas.
“Eso sería un problema”, dijo Kerri Webb, portavoz del Departamento de Libertad Condicional de Los Ángeles. “Ellos apenas pueden contenerse en una escuela secundaria”.
Los niños y niñas en Los Ángeles están a veces juntos para eventos especiales, pero se encuentran en unidades separadas. En los pabellones de menores que son mixtos, los niños y niñas se encuentran en alas separadas.
“El control de movimiento es muy rígido”, dijo.
El condado de Riverside tiene una política similar.
“Usted tiene una mejor capacidad para hacer frente a los problemas”, dijo Alan Crogan, oficial en jefe de libertad condicional de Riverside. “Nosotros no ponemos a los hombres y mujeres en la misma habitación”, o en áreas comunes.
Las ventanas están cubiertas
“Hemos aprendido a medida que avanzamos”, dijo Sean Barry, subdirector de libertad condicional. En Orange, con una capacidad de 434, Juvenile Hall es el mayor centro de detención, de cuatro que regula el departamento de libertad condicional.
Construido en 1956, ha sido objeto de renovación en los años 1970, 1990 y de nuevo en la década del 2000. Durante las actualizaciones, los funcionarios de libertad condicional han tenido en cuenta el hecho de que niños y niñas pueden ser alojados en las mismas celdas.
“Esto es 15 años más tarde”, dijo Barry dentro de uno de los barrios más recientemente construidos.
En las unidades más antiguas, los funcionarios deben tener en cuenta si una chica se encuentra en una unidad de primer o segundo piso, y si los niños pueden ver a través de la ventana en su habitación desde arriba.
“Hemos aprendido eso”, dijo Barry. ”No tenemos habitaciones en el interior que se puede mirar hacia abajo.”
Las puertas se supone que deben permanecer cerradas y son controladas de forma remota, por un oficial de libertad condicional a partir de una mesa central.
Una cubierta magnética se utiliza en las ventanas de las niñas para bloquear que nadie pueda mirar a escondidas, pero es fácilmente removible por los agentes cuando se les exige a los menores para comprobar cada 15 minutos. En otras salas, una toalla con cinta en la puerta se utiliza para cubrir la ventana. A excepción de las ventanas, las habitaciones están cerradas a la vista de las otras habitaciones.
La mayoría de las habitaciones individuales cuentan con servicios higiénicos en el interior, ofreciendo a los menores un poco de intimidad en las unidades que albergan a ambos sexos. Las duchas son comunes, pero los funcionarios de libertad condicional dijeron que los tiempos de ducha son escalonados y programados para los niños y niñas, que se duchan uno a la vez. Las ventanas hacia las duchas están bloqueadas por las persianas.
La colocación de reclusas de alto riesgo o con necesidades médicas en las unidades donde están alojadas las niñas con delitos menores, podría ser perjudicial, dijo Sentman.
El seis de marzo una niña se alojaba junto a 35 niños en una unidad de alto riesgo, mientras que una niña que necesita atención médica especializada se encontraba en otra ala con chicos, de acuerdo a los registros de población. Siete de las niñas estaban en la unidad mixta de admisión temporal.
“Ustedes han visto a niñas tal vez en 30 días y una chica puede parecer hasta de 40 años de vida. ¿Dónde están sus modos de pensar?”, dijo Sentman. ”Cada niño es evaluado por sus necesidades individuales y luego se le coloca en consecuencia.”
Debido al incidente sexual del 12 de febrero, las autoridades están investigando cómo fue que los dos jóvenes se quedaron solos en una de las habitaciones, dijeron las autoridades. Los dos menores de edad ya no están en la misma unidad.
El chico cumplió 18 años y ha sido trasladado a la cárcel del condado, aunque los funcionarios de libertad condicional a menudo mantienen a los menores bajo su custodia una vez que cumple los 18 años.
Algo salió mal
A pesar de las políticas y medidas de seguridad que están en vigor, los funcionarios admiten que algo salió mal.
“Estamos comprobando si las políticas y procedimientos han sido violados, y creo que es seguro decir que algunos sí, porque si nos fijamos en los controles de habitaciones de 15 minutos, obviamente si se hubiera hecho lo que se tenía que hacer el incidente no hubiera ocurrido, o habría sido detectado mucho antes”, dijo Barry.
Los funcionarios de libertad condicional dijeron que tal lapso es una anomalía.
“Si un miembro del personal o un grupo de funcionarios optaron por no seguir los procedimientos, hay que separarlo y aislarlo del personal”, dijo Sentman. “No es una excusa, de ninguna manera”.
¿Se han enfrentado a una situación similar en el pasado?
“He estado aquí durante 27 años y no me he enterado de alguno”, dijo Sentman. “Creo que nuestro centro de detención juvenil hace un excelente trabajo desde el día que entran y hasta el día que salen”.
Funcionarios de libertad condicional del condado de Orange señalan que no están en contra de las normas estatales de contar con unidades mixtas en los pabellones de menores. Las instalaciones del condado son inspeccionadas anualmente por la Autoridad Correccional del Estado, dijo Barry.
Debido a que es raro que las niñas menores de 18 años sean acusadas como adultos, algunos condados más pequeños en California, tales como Stanislaus y Placer, las alojan junto a los chicos, dijo Barry.
Los funcionarios del condado de Orange dijeron que podrían revisar las políticas del condado.
“Podemos echar una mirada en el espejo y decir: estas son las reglas y procedimientos para mitigar”, dijo Bryan Prieto, oficial en jefe de libertad condicional. ¿“Hay alguna manera en que podamos mejorar y que algo así no vuelva a suceder”?
