El número de congregaciones religiosas del país dispuestas a dar santuario a inmigrantes indocumentados en sus iglesias se ha duplicado de 400 a 800, tras la toma de posesión de Donald Trump como presidente de Estados Unidos.
Este movimiento de iglesias santuario, que tiene el propósito de resguardar a migrantes indocumentados que pudieran ser deportados, podría incrementarse aún más si el gobierno prosigue con operativos y redadas como se había anunciado en la campaña electoral.
Mientras que hay aquellos consideran que se están quebrantando las leyes federales al amparar a inmigrantes sin papeles, algunas iglesias no han titubeado al unirse a este movimiento para dar santuario, si es necesario, a todas aquellas personas que sean blancos de odio y discriminación.
“El número exacto de iglesias no se sabe a ciencia cierta, pero sabemos que sigue en aumento”, expresó Art Cribbs, director ejecutivo del Interfaith Movement for Human Integrity, que cuenta con una red de iglesias santuario para inmigrantes que enfrentan deportación en el norte y sur de California.
Claremont United Methodist Church y Claremont Unified Church of Christ Congregational son parte de esta red.
Hay varias iglesias que todavía están decidiendo si quieren ser santuario, añadió Cribbs.
Diócesis santuario
La Diócesis Episcopal de Los Ángeles—que abarca los condados de Los Ángeles, Orange, Riverside y San Bernardino—se ha declarado como una diócesis santuario, con la iglesia Santa Fe, en Inglewood, siendo un ejemplo.
Francisco García, reverendo episcopal de la Santa Fe, cree que habrá iglesias que den santuario de manera privada ya que no podrán decir que tienen a alguien albergado allí, por el temor que existe hoy en día.
“Para nosotros se trata de darnos cuenta de lo que está pasando en los vecindarios y que la gente sepa que nuestras iglesias episcopales son espacios seguros. Pueden venir y les podemos echar una mano”, dijo.
La Diócesis Católica de San Bernardino, por otro lado, no se ha declarado como una diócesis santuario.
Sin embargo, Gerald Barnes, obispo de la diócesis católica con sede en la ciudad de San Bernardino, ha dicho que dejaba que cada parroquia hiciera su propia decisión sobre el asunto.
Sin iglesias católicas
Hasta ahora, John Andrews, el portavoz, no ha sabido de una parroquia católica que se haya declarado santuario públicamente.
En 2014, una parroquia católica en Fontana albergó a varias familias centroamericanas por un tiempo, cuando llegaron al país y les pararon en la estación de patrulla fronteriza en Murrieta.
Por su parte, la iglesia First Congregational Church o FCC de Riverside, ubicada en la esquina de la Avenida Mission Inn y de la Calle Lemon, se ha declarado recientemente como una iglesia santuario.
Probablemente ayudarían a una persona o una familia seleccionada a través de un proceso instituido por los líderes de su iglesia lo cual incluye a abogados de inmigración y organizaciones comunitarias.
“Estamos tratando de resaltar las injusticias del sistema en su totalidad”, afirmó Jane Quandt, ministra sénior de dicha iglesia.
Hadley Bajramovic, abogada de inmigración de Riverside, confirma que ella conoce casos de individuos o familias que podrían necesitar santuario y que ya ha hablado con la iglesia sobre algunos de ellos.
También colaborará con la Coalición para la Justicia Inmigrante del Inland (ICIJ), en Ontario, con este proceso de encontrar a indocumentados que pudieran ser deportados.
“Estamos empezando a identificar a familias que corren el riesgo de ser deportadas”, dijo Javier Hernández, director ejecutivo de la ICIJ.
“Al identificarlas, tratamos de ver si podemos ayudarlas e intervenir antes de que pase algo. Por ahora, la iglesia santuario es el último paso en nuestro proceso de intervención”.
Estrategia efectiva
Varias fuentes indican que la estrategia de las iglesias santuario es efectiva dado que los agentes del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (o ICE) suelen evitar el arrestar en iglesias, escuelas, hospitales y demostraciones públicas porque se consideran como “zonas sensibles”.
“Hay cierto respeto por parte del ICE y de la Patrulla Fronteriza de no meterse dentro de los templos”, dijo Hernández. “Pero, de todas modos, queremos estar bien preparados para cuando se necesite”.
La Agencia Efe y la reportera Alejandra Molina de The Press-Enterprise contribuyeron a este reportaje
Nacimiento del movimiento santuario
Este movimiento de las iglesias santuario resurge del que fue iniciado en los años 80 cuando John Fife, ministro de una iglesia presbiteriana de Tucson en Arizona, se reunió con refugiados —sin papeles— que huían de las guerras en Guatemala, El Salvador, y otros países centroamericanos. De este movimiento, se involucraron unas 500 iglesias y otras organizaciones que no eran cristianas.
Fuente: The Episcopal News
