Las autoridades identificaron a un hombre, el lunes de esta semana, que estaba armado y que fue asesinado a tiros por agentes de la policía de Fullerton, después de una persecución a alta velocidad que terminó cuando el vehículo se estrelló contra una cerca y cayó 20 pies en un canal de drenaje.
El hombre ha sido identificado como Aurelio Paul Ramos-Navarette, de 22 años y residente de Buena Park, según dijo el sargento de la policía de Fullerton, Jeff Stuart. Ramos-Navarette, miembro de una pandilla documentada, fue declarado muerto en la escena, agregó.
La persecución comenzó aproximadamente a las 11:15 de la noche el jueves de la semana pasada, cuando un oficial de la patrulla trató de detener a una camioneta Dodge Ram 1500 color marrón, que estaba ocupada por dos hombres, en el área de la calle Euclid y la avenida Wilshire por violaciones de tráfico de menor importancia, dijo el sargento de la policía de Fullerton, Stuart.
El conductor no cedió y continuó hacia el oeste por la avenida de Malvern y como el vehículo se acercó a la calle Gilbert, a unas 90 millas por hora, el conductor perdió el control estrellándose contra una valla y en un canal de drenaje. La camioneta, que fue reportada como robada en Buena Park, aterrizó en el techo, dijo Stuart.
Ramos-Navarette, huyó de la camioneta y se escondió en un túnel de conexión en el canal de drenaje, dijo.
Momentos más tarde, salió del túnel y fue cuando disparó contra los agentes.
“Ellos respondieron al fuego y él fue alcanzado”, dijo Stuart, añadiendo que se desconoce cuántas veces fue baleado en espera de la investigación en curso.
“Tenía una pistola en su poder”, dijo Stuart. Ningún agente resultó herido en el tiroteo.
El otro hombre, Diego Figueroa, de 22 años y residente de Smithfield, Utah, fue llevado al Centro Médico UCI en Orange para ser tratado por lesiones leves que sufrió cuando la camioneta se hundió en el canal de drenaje de concreto, dijo Stuart.
No estaba claro si el hombre estaba detrás del volante, dijo, y agregó que la camioneta se encontraba en trámite para pruebas de ADN en el Laboratorio Criminal del condado de Orange.
Figueroa es sospechoso del asesinato del joven de 17 años de edad Jesse Rodríguez, en un tiroteo en el 2010, y fue fichado posteriormente en la cárcel de la ciudad de Fullerton bajo sospecha de delito por robo de automóviles y podría enfrentarse a cargos adicionales.
Según documentos judiciales, un hombre con el mismo nombre y fecha de nacimiento de Figueroa fue arrestado en el 2011 por un delito menor de resistencia a un oficial de paz. Se declaró culpable y fue sentenciado a 90 días de cárcel y libertad condicional de tres años. También tiene un puñado de violaciones de tráfico, incluyendo andar en bicicleta de noche sin una linterna y conducir sin una licencia de conducir válida, según los documentos.
Ramos-Navarette, también cuenta con numerosas infracciones, que van desde la violaciones de tráfico a estar en posesión de un recipiente abierto, según documentos judiciales.
Los documentos también muestran que un hombre con el mismo nombre y fecha de nacimiento se declaró culpable en 2010 de privación ilegal de un vehículo y terrorismo callejero, ambos delitos graves.
Fue condenado a dos años de prisión, tres años de libertad condicional, 270 días en la cárcel y al pago de la restitución.
La Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Orange está investigando el caso, como es habitual con los oficiales involucrados en tiroteos.
El Departamento de Policía de Fullerton también está llevando a cabo una investigación.
