Skip to content
AuthorAuthor
PUBLISHED: | UPDATED:

LOS ÁNGELES.- Fue una fuga audaz y compleja. Cortar metal, arrastrarse por túneles, trepar a un techo, bajar cuatro pisos con cuerdas improvisadas con sábanas.

Pero no se trata de una película de Hollywood sino de una fuga real, que obliga a las autoridades a buscar a tres prófugos —uno de ellos un presunto asesino— y descubrir cómo lograron escapar de una cárcel de máxima seguridad en California.

La prioridad era hallar a los tres hombres, posiblemente armados y considerados peligrosos, pero también se investiga si tuvieron ayuda dentro o fuera de la cárcel central para hombres del condado de Orange, dijeron las autoridades el domingo.

Jonathan Tieu, de 20 años, Bac Duong, de 43, y Hossein Nayeri, de 37, aguardaban juicios por crímenes violentos, aunque sin relación entre ellos. Desaparecieron del pabellón que compartían con otros 65 hombres el viernes, poco después del recuento de las 5 de la tarde, dijeron voceros policiales.

“Estamos agotando cada pista que tenemos” dijo el teniente de la policía del condado de Orange, Jeff Hallock, en una rueda de prensa por la tarde.

Los presos consiguieron herramientas y cortaron una reja con barrotes de 0,60 centímetros (un cuarto de pulgada) en un muro entre varias literas en un dormitorio que compartían con más de 60 hombres. Después utilizaron los túneles de fontanería y cortaron barras de acero de media pulgada antes de llegar a una zona no vigilada del tejado de edificio, de cuatro plantas. Allí retiraron parte del alambre de espino y se descolgaron con cuerdas hechas con sábanas, según las autoridades.

Es posible que se organizara una pelea entre otros presos para retrasar el recuento habitual de las 8 de la tarde, y la fuga no se descubrió hasta las 9 de la tarde, señalaron las autoridades.

Uno de los reclusos es Jonathan Tieu, de 20 años detenido con una fianza de un millón de dólares en octubre del 2013 por homicidio, intento de homicidio y agresión armada. Se cree que su caso está ligado a pandillas.

Su madre y su hermana dijeron el domingo que no habían tenido noticias de él y le pidieron entre lágrimas que se entregara.

“Le extraño… quiero que vuelva mi hijo”, dijo a KABC-TV su madre, Lu Ann Nguyen.

“Sé con certeza que él no fue quien organizó esto. Creo que fue manipulado o engañado para hacer esto”, dijo su hermana, Tiffany Tieu.

“Entréguese. No deje que se alargue”, añadió.

Si bien atrapar a los prófugos es la prioridad, se ha abierto una pesquisa separada para determinar cómo consiguieron escapar y si hay otros presos o empleados de la cárcel implicados, señaló Hallock.

“Lo que puedo asegurarles es que los compromisos de seguridad se han corregido”, dijo.

La jefa de policía del condado, Sandra Hutchens, había dicho antes el domingo que no era posible realizar recuentos de reos durante el día.

“Nos vemos limitados en que ésta es una cárcel con mucho movimiento”, explicó. “Tenemos gente que va al tribunal, tenemos gente que va a recibir tratamiento médico, y no podemos dejarlos encerrados 24 horas al día. Hay requisitos de que tienen que salir y hacer ejercicio de vez en cuando”.

Fiscales y otras personas relacionadas con los casos contra los tres prófugos fueron informados del suceso y se tomaron medidas para protegerlos, indicaron las autoridades.

Es la primera fuga en esta instalación en 20 años donde habitan 900 reclusos.

La jefa de policía señaló que la gente debía considerar a los tres hombres como armados y peligrosos y no intentar acercarse a ellos.

El Servicio de Alguaciles de Estados Unidos ofreció una recompensa de 30.000 dólares que se sumaba a las de 20.000 anunciada por el FBI por información que lleve a la detención de los tres.

Otro de los presos fugados es Hossein Nayeri, de 37 años, detenido sin derecho a fianza desde septiembre de 2014 acusado de secuestro, tortura, agresión agravada y robo. Después de cometer los delitos en 2012, Nayeri huyó de Estados Unidos a su natal Irán, donde permaneció por varios meses. Fue arrestado en Praga en una escala de Irán a España, a donde viajaba para visitar a parientes.

El tercero, Bac Duong de 43 años, estaba detenido sin derecho a fianza desde el mes pasado por intento de homicidio, agresión con arma mortal, posesión de un arma de fuego y otros cargos.