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Un amplificador Vox de válvulas, un par de bajos desgastados y una pileta de discos de acetato hacen juego con Imperfecto Extraño, el nuevo disco de Enjambre.
Un amplificador Vox de válvulas, un par de bajos desgastados y una pileta de discos de acetato hacen juego con Imperfecto Extraño, el nuevo disco de Enjambre.
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CIUDAD DE MÉXICO.- Un amplificador Vox de válvulas, un par de bajos desgastados y una pileta de discos de acetato hacen juego con Imperfecto Extraño, el nuevo disco de Enjambre.

Un piso de madera y asientos de piel de hace 50 años terminan de dar ambiente al bar de la Colonia Roma en el que la banda explica que el álbum que sale a la venta en formato físico y plataformas digitales nació así, en condiciones con menos modernidad.

“Grabamos con cinta electromagnética, que ya casi no se usa. Todos esos elementos hacen que este sea un disco especial para nosotros.

“La segunda mitad del disco la grabamos en un estudio de León, Guanajuato, llamado Testa, que tiene la cinta. Ahí hay cosas muy antiguas y de buena calidad”, añadió el vocalista, Luis Humberto.

Conformada también por Julián en los teclados, Rafael en el bajo, Ángel en la batería y Javier en las guitarras, la banda viajó a los estudios Sonic Ranch, en El Paso, Texas, luego de encontrar un sonido basado en los 60 y 70.

“Empecé a coleccionar sintetizadores antiguos, teclados que mucha gente vendía como obsoletos, cuando, a pesar de ser muy simples nos dieron la calidez y el toque especial que buscábamos.

“Mientras ensayábamos las canciones, traía un teclado nuevo y lo incorporábamos a la canción. Es algo diferente a otros discos, ahora tenemos estos sonidos setenteros puros”, compartió Julián Navejas, tecladista y guitarrista.

La idea de la banda era acercarse a un sonido conocido por ellos desde siempre y el resultado fue, según consideraron, el mejor disco de su carrera. 

“Quisimos hacer algo más como lo que sonaba en la casa con nuestros papás, nuestros tíos. Esa es la música que nos gusta escuchar y nos gustaban mucho las grabaciones”, comentó Luis Humberto.

El material fue producido por Phil Vinall, quien ha trabajado con Radiohead, Pulp y Placebo, por mencionar algunos grupos.

“Ya habíamos trabajado con él en vivo y hacía cosas que nos llamaban la atención. Ese fue nuestro primer acercamiento, y cuando empezamos a trabajar las canciones de nuestro disco anterior, nos dijo: ‘Lo que ustedes quieren es un sonido de los 70’.

“‘Yo en los 70 trabajaba en los estudios, así que yo sé cómo sacar ese sonido’. Eso fue lo que nos atrajo de su contribución, que conoce el estudio, los aparatos y los estilos de grabación de antes”, explicó Luis.