ANAHEIM – Estudiantes en la Escuela Preparatoria Magnolia sentían que arriesgaban la vida cada vez que cruzaban una intersección cerca de su complejo educativo.
Aunque había un paso de peatones, los conductores constantemente aceleraban sobre las líneas amarillas al conducir a lo largo de la Avenida South Magnolia y Winston Road. Algunos estudiantes le dijeron a un maestro que casi perdían la vida.
Entonces los adolescentes decidieron actuar.
El jueves, 22 de enero, la escuela llevó a cabo una ceremonia para marcar el éxito de los estudiantes en conseguir que la municipalidad instalara un semáforo en la intersección, a un costo de $429,000.
Manuel Colón, asistente del superintendente para el Distrito Escolar Unificado de Anaheim, dijo que las escuelas imparten clases de participación cívica – lo cual se demuestra con esta acción.
“No creo que haya un mejor ejemplo que el de los estudiantes en la Escuela Preparatoria Magnolia”, dijo Colón.
La campaña inició en el ciclo escolar 2011-12, cuando estudiantes de Magnolia asistieron a una Cumbre de Seguridad de Tráfico Juvenil como parte del evento Friday Night Live, un programa estatal diseñado a reducir las muertes ligadas a conductores ebrios y que motiva a los estudiantes a mejorar sus comunidades.
Se les pidió a los estudiantes de Magnolia que encontraran una intersección peligrosa cerca de su escuela y la investigaran. Los estudiantes escogieron a Magnolia y Winston, al suroeste del complejo educativo y cerca de un centro comercial y algunas viviendas.
Grupos de tres estudiantes se colocaron en las esquinas y grabaron lo que vieron antes y después de la escuela, notando cuántas veces los conductores estaban enviando mensajes de texto, comiendo, maquillándose o conduciendo a exceso de velocidad.
Un grupo central de 200 estudiantes de Magnolia tomó turnos durante un mes, y los estudiantes recopilaron sus datos para la municipalidad.
Eventualmente, la ciudad recibió $386,100 en fondos estatales y añadió $42,900 más en fondos municipales. La construcción inicia este verano.
Los líderes estudiantiles ya se han graduado, pero seis que aún viven en el vecindario regresaron para la ceremonia del jueves. Jonathan Arias, de 19 años, comentó: “Creemos que podemos dar un ejemplo a seguir para otras escuelas”.
