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    Arlanza tenía un jardín comunitario hace 10 años que ahora quieren reactivar

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    Estudiantes del Projecto de Jóvenes Líderes en la preparatoria Norte Vista

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    Estudiantes exponen las ventajas del rescate de este jardín comunitario en Arlanza

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    Encontraron piezas hechas a mano por los antiguos agricultores de este jardín

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    Las piezas encontradas fueron restauradas y reutilizadas en el letrero del jardín

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    El día de Martin Luther King más de 100 voluntarios limpiaron el jardín comunitario de casi un acre

  • Autoridades de la ciudad han dado su respaldo al resurgimiento...

    Autoridades de la ciudad han dado su respaldo al resurgimiento de este jardín

  • Estudiantes de la Escuela Preparatoria Norte Vista junto a miembros...

    Estudiantes de la Escuela Preparatoria Norte Vista junto a miembros de la comunidad.

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Hace cuatro años, Samantha Lynne Wilson estaba en la India enseñado a jóvenes de ese país asiático sobre liderazgo.

Hasta que un día, Sinar Lomelí, consejera de la Escuela Preparatoria Norte Vista en Riverside vio una de sus presentaciones y le dijo que tenía que realizar esa labor en esta institución.

Fue así como hace dos años, 15 estudiantes de esa preparatoria comenzaron el Proyecto Jóvenes Líderes. Los estudiantes se reúnen en la escuela los viernes, además de una vez al mes en lo que han denominado “los sábados de justicia social”.

“Hicimos una encuesta entre los estudiantes para conocer cuáles eran esos temas que más les preocupaban y respondieron: violencia de las pandillas, inmigración, agricultura y temas ambientales”.

En sus investigaciones estos estudiantes se dieron cuenta que había un terreno que hace 10 años había sido un jardín comunitario en la comunidad de Arlanza, en Riverside, y que podía revitalizarse.

“Este es un proyecto ambicioso. Se trata de casi un acre de terreno que está conectado a la Escuela Primaria de Arlanza”, dijo Wilson.

En junio del año pasado, los estudiantes reunieron entre 40 y 45 miembros de la comunidad en ese parque para informarles qué pretendían hacer.

Luego, en julio, recibieron un entrenamiento de liderazgo. Desde entonces han estado estableciendo contactos con la comunidad. En noviembre celebraron allí el Día de los Muertos y en diciembre se propuso realizar un centro de arte y cultura en combinación con el jardín comunitario.

“Les informamos que podríamos crecer frutos saludables para la comunidad, además de establecer un espacio donde los jóvenes puedan ir a compartir y escuchar música”, señaló Wilson.

El 16 de enero de este año, día de Martin Luther King, más de 100 personas entre estudiantes de esta preparatoria junto a maestros y miembros de la comunidad lograron reunirse para limpiar el terreno.

“Encontramos una pieza que había sido pintada por los niños del área hace más de 10 años. Los vecinos y el Jardín Botánico de la Universidad de California en Riverside (UCR) donaron plantas y buscamos materiales reciclables para construir el letrero”, dijo Wilson.

Además, en su misión investigativa visitaron el jardín comunitario de la Escuela Primaria Emerson, Riverside, para conocer sobre su experiencia.

Aunque no hay todavía ningún contrato escrito, autoridades de la ciudad de Riverside se han mostrado interesadas en apoyar la rehabilitación de este jardín comunitario, entre ellos, el director del Departamento de Parques y Recreación, Ralph Nuñez, y el concejal Andy Melendrez.

Incluso, existe la posibilidad que algunos de los frutos de ese jardín puedan ser vendidos en el mercado al aire libre (farmer’s market) en el centro de la ciudad de Riverside y los fondos se reinvertirán en gastos como agua y electricidad.

Actualmente, el Proyecto de Jóvenes Líderes de la Preparatoria Norte Vista está integrado por 35 estudiantes.

El estudiante Oscar Méndez, de 16 años, es uno de los integrantes de este proyecto.

“Me llamó la atención que este grupo quiere renovar el jardín”, dijo este joven que recuerda haber estado en ese jardín comunitario cuando era niño. “Tengo una hermanita chiquita, creo que a ella le gustaría estar allí, para que pueda crecer en una comunidad bonita”.

Méndez relató que lo más difícil de este grupo es planificar todo el trabajo y lograr que todo el grupo pueda estar presente en las juntas y actividades.

Además, deben continuar con sus estudios en la escuela.

“A veces llegamos a la casa y tenemos que terminar las tareas”, dijo Méndez.

Una sus preocupaciones es el consumo de droga en su comunidad y afirmó conocer a otros que consumen, pero que nunca las ha probado.

“He visto drogas en el vecindario desde que tenía como 8 años”.

En este proyecto los jóvenes realizan retiros, asisten a conferencias y tienen oportunidades de conocer mentores gratis.

Viajeros

“Hemos hecho muchas recaudaciones de fondos porque creemos que viajar a otros países debe ser accesible para todos”, explicó por su parte la coordinadora de este proyecto, Samantha Lynne Wilson.

Por ello, en julio del año pasado, los estudiantes lograron recaudar 25,000 dólares para ir a la India durante dos semanas y compartir con los jóvenes de ese país y conocer sobre la situación de los derechos de la mujer.

Katty Gutiérrez, una estudiante de 16 años, recuerda de su viaje a la India la visita que realizaron a una escuela primaria pública.

“Me gustó la educación, los niños eran muy amables y nos saludaban”.

Pero también notó la diferencia al asistir a una escuela privada, donde los niños estaban mejor vestidos, se veían mejor alimentados y eran de piel más clara.

El Proyecto de Jóvenes Líderes “me ha abierto mi mente para ver diferentes perspectivas, no sólo de nosotros mismos, sino de lo que está pasando en el mundo”, dijo Gutiérrez.

Entre el 15 y 19 de febrero de este año, este grupo viaja a Nogales, México, donde compartirán con organizaciones de estudios étnicos, trabajadores de las maquiladoras, abogados, defensores de los derechos humanos y guardias fronterizos en ambos lados de la frontera.

“Además, vamos a caminar por el desierto. La ruta que atraviesan los inmigrantes para cruzar la frontera porque las deportaciones y la inmigración son dos de los temas que más preocupan a los estudiantes”, dijo Wilson.

“El tema de la inmigración para mí es muy importante. A mi hermano mayor lo deportaron. Están separando familias, eso no es necesario… todos somos seres humanos”, dijo Gutiérrez.

Por su parte, Dennise Díaz es otra estudiante de 16 años que se unió recientemente a este proyecto.

“Mis dos padres vinieron de México y han tenido problemas de inmigración. Cuando les dije que iba a México, primero se asustaron, no querían que fuera, pero fueron a una junta en la escuela y vieron que se trataba de algo bueno”.

Díaz quiere ser abogada de inmigración.

“Nuestra comunidad [Arlanza] está etiquetada como una comunidad no muy buena, pero podemos demostrar que éste puede ser un lugar mejor”, dijo Díaz.

Si desea conocer cómo puede participar y beneficiarse en este jardín comunitario denominado “Cultiva Arlanza”, las juntas se realizan en el Arlanza Community Center el viernes 17 de febrero y el viernes 2 de marzo a las 5 de la tarde.

También puede llamar al (951) 616-7723 ó seguirlos a través de Facebook en ‘childleaderproject’ y en Twitter @clpinc.