SACRAMENTO Cerca de 2 millones de estudiantes de escuelas públicas fueron catalogados como ausentes sin excusa por lo menos una vez durante el pasado año escolar, y un paquete de proyectos de ley a votación esta semana podría ayudar a los funcionarios que intentan reducir ese número.
Es un problema que desafía a los distritos escolares y condados de todo el estado y en todo el Sur de California: el condado de San Bernardino tiene el índice de ausentismo sin justificación más alto del estado –36.07 por ciento durante el año escolar 2012-13.
El llenar esos escritorios vacíos ya es ley estatal: si un niño pierde demasiado tiempo de instrucción, los padres podrían enfrentar multas y penas de cárcel. Pero, la fiscal general, Kamala Harris, y otros funcionarios indican que también hay razones más amplias para reducir la tasa de ausentismo injustificado del estado, y citan la conexión entre la educación pública y la seguridad pública.
“Cuando los niños se ausentan de la escuela, son más propensos a abandonar los estudios antes de graduarse de la preparatoria y llegar a ser víctimas o autores de delitos”, dijo Harris.
Ella se unió con varios legisladores para impulsar medidas que buscan ayudar a las escuelas y los distritos a abordar las razones del ausentismo crónico y mejorar el seguimiento para que los funcionarios puedan orientar mejor a los estudiantes que necesitan ayuda. Cuatro de los proyectos de ley están en la agenda para votación el viernes en el Comité de Asignaciones de la Asamblea (el quinto está en espera de la acción del Comité de Asignaciones del Senado).
Una de las medidas, del asambleísta, Chris Holden (demócrata de Pasadena), pide recoger más información sobre si los esfuerzos de intervención están siendo efectivos para que las escuelas, distritos y condados puedan comparar su enfoque con lo hacen en otras áreas.
Es un intento para que los niños regresen a las aulas, las autoridades escolares, la policía y los fiscales están organizando escuelas de sábados, inspecciones de ausentismo y visitando negocios donde los niños que se ausentan de clase podrían estar reuniéndose.
Según los datos de la Oficina del Fiscal General de la Nación, casi el 40 por ciento de los estudiantes que se ausentan de la escuela son de escuelas primarias. Casi 83,000 perdieron más de tres semanas de clases.
Los agentes del orden público locales comparten la preocupación de Harris. La oficina del Fiscal de Distrito del condado de San Bernardino tiene un proyecto de “Vamos a terminar con el ausentismo”, y un folleto del programa que describe las ausencias crónicas como el “portal de acceso a la delincuencia juvenil y, después, la delincuencia entre adultos con crímenes más graves”.
El Distrito Escolar Unificado de San Bernardino City utiliza una táctica que llama ‘Operación: Recuperar a nuestros estudiantes’. En el programa, las autoridades escolares y los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley tocan puertas para encontrar a los absentistas y regresarlos a la escuela. En marzo, el distrito presentó una adición al programa en la que los funcionarios del distrito y agentes del orden público visitan negocios que son imanes para los absentistas.
En Riverside, el año pasado la policía visitó los hogares de los absentistas crónicos. En una inspección de ausentismo en enero, los agentes contactaron a 29 jóvenes y entregaron citaciones a siete por vagabundear de día. El equipo visitó 12 hogares y habló con los padres de los absentistas crónicos.
Un obstáculo que enfrentan los condados y las escuelas es cómo reunir y analizar las estadísticas de asistencia. Por lo menos un distrito encontró que algunos estudiantes que viajaban a eventos deportivos fueron contados en las estadísticas de absentismo escolar.
Las diferencias en cómo las escuelas recogen la información puede hacer difícil identificar a los estudiantes que necesitan ayuda. Parte de la ayuda podría llegar de un proyecto de ley del asambleísta Raúl Bocanegra (demócrata de Los Ángeles) el cual busca mejorar la manera en que se recogen y mantienen esas estadísticas.
En última instancia, los padres que no toman acción pueden ser llevados a un tribunal y presentarles cargos por violación a la Ley de Educación Obligatoria de California, la cual requiere que todos los niños desde la edad de 6 años estén en la escuela –puntuales, todos los días.
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