LOS ÁNGELES – El Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles (LAUSD) – el segundo más grande del país – dejará de criminalizar la conducta y los actos de indisciplina de sus estudiantes.
El martes, 19 de agosto, oficiales de LAUSD anunciaron que su plan de conducta, que por varios años implementó y que enfrentó a miles de estudiantes latinos y afroamericanos con el sistema judicial, tiene que ser modificado. A partir del recién iniciado ciclo escolar 2014-2015, agentes del Departamento de Policía Escolar de Los Angeles (LASPD) comenzarán a aplicar reformas políticas radicales para reducir el número de citaciones y detenciones de estudiantes.
La nueva política y protocoles requieren ahora que las violaciones menores a la ley, que con anterioridad resultaban en citaciones y detenciones, ahora sean abordadas a través de métodos de intervención por parte de funcionarios del plantel escolar, prácticas restaurativas o por medio de la transferencia a un Centro Juvenil o Centro Familiar.
Estas reformas integrales surgieron después de más de dos años de luchas y organización comunitaria a través de la Campaña de Derechos Comunitarios (CRC) del Centro de Estrategia Laboral de la Comunidad.
La adopción de un Plan de Igualdad ante la Ley limitará la participación de la policía en la disciplina escolar que actuaba bajo la política de “cero tolerancia”.
Las nuevas reglas, al mismo tiempo, coadyuvará en la participación de asesores legales de la organización Public Council en cuanto a instituir alternativas a los arrestos y abordar con mayor eficacia los incidentes en los campus escolares.
“La cero tolerancia ha perdido el rumbo en el país”, dijo el superintendente del LAUSD, John Deasy. “Cero tolerancia no significa cero consecuencias”.
En años anteriores, el LAUSD y LASPD, que cuenta con la fuerza policial escolar más grande de la nación (350 policías juramentados, 126 no juramentados y 34 civiles), han tenido los más altos índices de citaciones y detenciones de todos los distritos escolares.
A finales de 2012, Michael Nash y Donna Groman, jueces del Tribunal de Menores organizaron una cumbre con expertos de la organización Public Council para desarrollar soluciones a la sobreabundancia de niños arrestados en la escuela por delitos de bajo nivel e hicieron recomendaciones a los administradores del LAUSD.
El Tribunal de Menores reveló en 2013 que tan solo en la ciudad de Los Angeles, el Departamento de Policía Escolar emitió casi 1,100 arrestos, 94% de los cuales fueron estudiantes de color, latinos y afroamericanos.
“Hay estudios nacionales que señalan que cuando [los estudiantes] son arrestados, tienen doble posibilidad de involucrarse en el sistema judicial”, dijo a UNIDOS, el juez Michael Nash. “Estas reformas ayudaran a que cambien y bajen los números [en el LAUSD]”.
El reporte de Nash y Groman señala que, aun cuando los estudiantes afroamericanos representan el 10% de la población infantil, fueron el 31% del total de arrestos.
Los estudiantes latinos representaron el 63.5% (691de las detenciones) y son el 73.4% de los 650,000 estudiantes del LAUSD.
En cambio, sólo el 2.4% de los estudiantes blancos fueron arrestados (26 en total), y son el 8.8% del estudiantado.
“Hemos dado otro paso hacia la justicia”, expresó Mónica García, representante del Distrito 2 del LAUSD. “Los nuevos protocolos beneficiarán a los niños y a sus familias”.
Frente a la preparatoria Manual Arts, en el sur-centro de Los Angeles, estudiantes, organizadores, líderes comunitarios y defensores de los estudiantes celebraron la victoria.
“Este es un triunfo de los derechos civiles”, valoró Manuel Criollo, organizador de la Campania de Derechos Comunitarios. “Es un gran momento, porque se ha dejado de criminalizar a los estudiantes”.
Los esfuerzos de la lucha comunitaria incidieron en la reducción de los citatorios para estudiantes que llegaban tarde a la escuela o se ausentaban más del 90% del año escolar.
Debido a una reforma amplia al toque de queda diurno que se implementó en 2012 y que limitaba las multas a los estudiantes, en el afán de poner fin a la práctica de multas por ausentismo escolar o llegadas tardías, los citatorios disminuyeron a 3,000, comparados con 7,740 en 2011-12 y 10,719, en 2010-11.
“Todos hemos aprendido que hay mejores alternativas que el castigo”, aseguró Laura Aguilar, quien se graduó de la preparatoria Manual Arts. “Es emocionante para comenzar el nuevo año escolar viendo cómo la aplicación de los nuevos protocolos policiales creará protecciones y servicios reales para los jóvenes”.
Según los líderes comunitarios, el contacto con la policía es un fuerte indicador de si un estudiante no terminará la escuela, si tendrá que repetir el año, si acabará en una cárcel juvenil o bien dentro del sistema de justicia penal. De hecho, un solo arresto duplica la probabilidad de deserción escolar de un niño”.
Steven Zipperman, jefe del LASPD expuso que las nuevas directrices con respecto a funciones y responsabilidades de los agentes policiacos en los recintos escolares del LAUSD, en enfocan en intervenciones de apoyo sobre incidentes y previene que los estudiantes se inmiscuyan en el sistema juvenil y el sistema penal por violaciones menores de la ley.
Según el funcionario, los nuevos protocolos de intervención “han sido un paso fundamental para la transformación de nuestras escuelas”.
“Los nuevos protocolos contienen directrices claras con respecto a las funciones y responsabilidades de los agentes de policía en el campus y establecen criterios para ayudar a los oficiales a dar respuestas adecuadas a la disciplina y conducta del estudiante, antes de las respuestas penales”.
Nuevas reglas del Plan
Los policías del LASPD son requeridos para seguir un proceso de tres pasos antes de otorgar una multa o arresto de un estudiante por violación a 10 códigos criminales y que pueden ser resueltos por un administrador escolar a causa de: entrar sin derecho a un recinto escolar siendo estudiante del LAUSD, tirar basura, robo menos (de $50) posesión de tabaco, posesión de alcohol o consumir alcohol, posesión de marihuana (no fumarla), pelear y arresto por agresión.
Tirar basura, posesión de tabaco y robo menor de $50 sería resuelto siempre por un administrador escolar.
Limita los arrestos y multas por peleas dentro de las escuelas.
Respuestas graduales para prevenir una multa o la transferencia del estudiante cuando el incidente en que se vea involucrado es el primer.
Oportunidad de acceso a un Centro Familiar de Recursos, antes de que la multa sea emitida.
Hacer énfasis en la justicia restaurativa y crear oportunidades para resolver un conflicto, en lugar de aplicar la disciplina que criminalice un incidente.
Enfatizar que los jóvenes se mantengan en un recinto escolar, antes que en una corte.
Establecer un compromiso para revisar estadísticas del LASPD con organizaciones comunitarias para asegurar que se están cumpliendo las nuevas directrices.