La empresa de reciclaje, Exide Technologies, anunció que se le citó por el gran jurado en un caso criminal que involucra su asediada planta de Vernon.
La compañía con sede en Milton, Georgia, hizo el anuncio de la citación el jueves, 14 de agosto en su presentación trimestral con la Comisión de Bolsa y Valores. La citación fue emitida el 8 de agosto.
“La orden de comparecencia solicita la presentación de documentos relacionados con el transporte de materiales y emisiones de partículas a la atmósfera”, indicó la compañía en la presentación. “La empresa fue informada de que su planta y ciertos individuos no identificados son los objetivos de la investigación. La empresa planifica cooperar con la investigación”.
La Procuraduría General de los Estados Unidos se negó hacer comentarios.
La empresa Exide tiene operaciones en 80 países y se especializa en el reciclaje de baterías de plomo-ácido.
La compañía reporta que puede procesar 25,000 baterías de automóviles al día en su planta de Vernon, construida en 1922. El gigante mundial de reciclaje se hizo cargo de la planta – que está situada en 15 acres en el corredor industrial de Vernon – en el 2002.
Las preocupaciones sobre la calidad del aire aumentaron continuamente durante buena parte de la década, lo que desató una disputa de muchos años entre Exide y South Coast Air Quality Management District (AQMD, por sus siglas en inglés), quien repetidamente ha impuesto restricciones y multas en contra de la empresa. La planta fue cerrada en marzo mientras seguía trabajando para cumplir con los requisitos de AQMD para mejorar su proceso de filtrado de aire.
Exide también acordó limpiar 39 viviendas – muchas de ellas en Boyle Heights y Maywood – en donde se encontraron altos niveles de plomo en el suelo. Los contratistas contratados por la empresa iniciaron la limpieza el lunes y podrían terminar tan pronto como la próxima semana.
La compañía también anunció el jueves 64 despidos en Vernon y dijo que mantendrá a los 73 empleados restantes allí para ayudar a manejar los nuevos equipos de control del polvo. Ese equipo representa una inversión de $5 millones, parte de los $20 millones que la empresa indicó que ha gastado en medidas ambientales, de salud y de seguridad en las instalaciones desde el 2010.
