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Según un informe, más madres latinas aceptaron que quieren más información sobre como alimentar a sus bebés. (Uriel Sinai/Getty Images)
Según un informe, más madres latinas aceptaron que quieren más información sobre como alimentar a sus bebés. (Uriel Sinai/Getty Images)
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Según una encuesta nacional reciente, las madres hispanas desean continuar eligiendo la manera en que alimentan a sus bebés y acceder sin limitaciones a información sobre la alimentación de los lactantes. La reciente encuesta también muestra que las madres hispanas en los Estados Unidos no están de acuerdo con las políticas gubernamentales u hospitalarias, que limitan el acceso a la información sobre muestras y leche maternizada durante su estadía en el hospital. La encuesta, representativa a nivel nacional y realizada por el equipo bipartidista de Greenberg Quinlan Rosner Research (GQRR) y Public Opinion Strategies (POS), fue la repetición de una encuesta y opiniones recolectadas en el año 2009, de más de 1,000 madres de niños de 12 meses de edad y menores (de las cuales 210 fueron identificadas como hispanas).

“Las madres hispanas nos dicen que desean sentirse apoyadas por los hospitales y proveedores de atención médica, ya sea que decidan amamantar a su bebé o alimentarlo con leche maternizada”, afirma Anna Greenberg, vicepresidente sénior de GQRR. “Es importante para las madres estar bien informadas. Ellas confían en que los hospitales no limitarán el acceso a información sobre la alimentación de los lactantes y a muestras de leche maternizada”.

Resultados clave

El 62 por ciento de las madres hispanas ya han decidido cómo alimentar a sus bebés antes de ingresar al hospital.

El 79 por ciento de las madres hispanas obtienen información sobre la alimentación de los lactantes a través de sus médicos y enfermeras.

Las madres hispanas describieron como las tres barreras más importantes para amamantar a sus bebés: el no poder producir suficiente leche materna, el hecho de que deben volver a trabajar o a estudiar y el costo del sacaleches.

El 93 por ciento de las madres hispanas afirmaron que el hecho de limitar el uso de leche maternizada en el hospital no hubiese cambiado su decisión de amamantar o no, ni del tiempo de amamantamiento.

El 91 por ciento de las madres hispanas están de acuerdo en que los hospitales entreguen bolsas de alta hospitalaria con muestras de leche maternizada, y el 83 por ciento afirmó que utilizó las muestras que se le entregaron.

El 72 por ciento de las madres hispanas estaban en desacuerdo con las políticas hospitalarias que limitan las bolsas de alta hospitalaria, con información sobre la alimentación de los lactantes y muestras de leche maternizada. El 82 por ciento se opuso a las limitaciones gubernamentales en hospitales sobre las bolsas de alta hospitalaria.

“La Asociación Nacional de Enfermeras Hispanas (National Association of Hispanic Nurses, NAHN) considera que la mejor opción en relación con la alimentación de los lactantes es amamantar. Sin embargo, también creemos que es importante que las madres reciban información sobre amamantamiento y sobre leche maternizada”, afirmó José Alejandro, presidente de NAHN. “Según la nueva encuesta, sólo el 55 por ciento de las madres hispanas consultadas informaron que recibían material educativo sobre la leche maternizada para lactantes. Es posible que las madres hispanas que no reciben información sobre la preparación y uso seguro de la leche maternizada se vean desfavorecidas”.

Cuando se les preguntó qué medidas ayudarían a incrementar el amamantamiento en los Estados Unidos, el 24 por ciento de las madres hispanas respondió: “Garantizar la licencia por maternidad paga o prolongarla”, y el 28 por ciento de las madres hispanas que reciben asistencia médica y nutricional a través del programa para Mujeres, Bebés y Niños (Women, Infants and Children, WIC) respondió: “Proporcionar más apoyo por parte de los profesionales de la atención médica una vez que la madre deja el hospital, incluidas las consultas a domicilio después del parto”. Las madres hispanas también afirmaron que les gustaría recibir más apoyo para amamantar en sus lugares de trabajo.

“Estos son espacios en donde los proveedores de atención médica, el gobierno y los empleadores podrían brindar más apoyo a las madres hispanas para incrementar las tasas de inicio y duración del amamantamiento”, agregó Alejandro.

Las madres hispanas reconocieron un conjunto de otras barreras que las limitan a iniciar o continuar el amamantamiento. Entre las más comunes, se incluyen la imposibilidad de producir suficiente leche y los problemas asociados con el amamantamiento (por ejemplo, pezones doloridos o agrietados, mamas inflamadas o llenas, infección o abscesos mamarios). “Muchas madres hispanas desean amamantar”, declara Greenberg, “pero generalmente se dan cuenta de que al momento de volver a trabajar, continuar amamantando exclusivamente y mantener el suministro de leche puede ser difícil sin el apoyo apropiado”.

Para obtener más información, visite momsfeedingfreedom.com