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"El mensaje central es que esperemos que lo mejor venga, pero vamos a prepararnos para lo peor", dijo Mario Cuevas, cónsul mexicano en el condado de Orange.
“El mensaje central es que esperemos que lo mejor venga, pero vamos a prepararnos para lo peor”, dijo Mario Cuevas, cónsul mexicano en el condado de Orange.
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Si usted creció en, por ejemplo, Long Beach, y le dijeron que necesita mudarse a la Ciudad de México, ¿cómo lo haría?

Algunos funcionarios del Consulado Mexicano en Santa Ana publicaron esta semana una versión de esta pregunta, ya que los jóvenes mexicanos que han sido protegidos por DACA solicitaron información tras la decisión de la administración Trump, de finalizarlo durante los próximos seis meses.

Lo que los jóvenes aprendieron fue que México ofrecerá ayuda – en la vivienda y la colocación laboral e incluso en las lecciones de español – incluso mientras el gobierno mexicano hace presión ante el Congreso de Estados Unidos en nombre de los jóvenes a los que consideran estadounidenses aunque no oficialmente.

“El mensaje central es que esperemos que lo mejor venga, pero vamos a prepararnos para lo peor”, dijo Mario Cuevas, cónsul mexicano en el condado de Orange.

El “peor”, a los ojos del consulado y muchos de los que interesados, es la deportación masiva de personas que crecieron en los Estados Unidos después de ser traídos aquí sin la documentación apropiada cuando eran unos niños.

Alrededor de 800,000 personas han sido protegidas por DACA en los últimos cinco años, la gran mayoría (93 por ciento según una reciente encuesta) trabajando o asistiendo a la escuela a tiempo completo. Por reglas del programa DACA, no tienen antecedentes penales y, por otras medidas, están teniendo éxito como adolescentes o jóvenes adultos que se esfuerzan por establecer una vida independiente en los Estados Unidos.

La edad media de un protegido DACA es de unos 25 y la edad promedio de llegada a los Estados Unidos es de 6 años, números que sugieren que muchas personas tienen poca experiencia de vivir en el país de su nacimiento. La gran mayoría – alrededor de 618,000 – nació en México.

Por ahora, los defensores de inmigración y otros esperan que el Congreso apruebe una reforma migratoria que ofrezca protección permanente a los receptores de la DACA.

Pero incluso cuando el gobierno de Trump instó al Congreso a presentar un proyecto de reforma a principios de marzo, surgieron informes de noticias de que la administración también emitió un memorando al Departamento de Seguridad Nacional para asesorar a los receptores de DACA a “prepararse y organizar su salida de los Estados Unidos”.

Cuevas dijo que México estará listo para darles la bienvenida – con varios programas de repatriación ya en marcha y programas enfocados en la planificación.

“Si bien son más estadounidenses, los consideramos binacionales”, dijo Cuevas de los ‘soñadores’. “Así que hay mucha voluntad política (en México) para ayudarles”.

Alrededor de un año atrás, cuando algunos inmigrantes estaban pensando en dejar los Estados Unidos después de las elecciones presidenciales de 2016, el gobierno mexicano implementó programas para ayudar a los repatriados a encontrar trabajo y vivienda. Algunos, incluidos los préstamos para pequeñas empresas, estaban orientados hacia los receptores de DACA. Los programas de empleo tienen como objetivo desarrollar las habilidades que los inmigrantes aprendieron en América.

“Les ayudaremos a conseguir trabajo en todos los estados (mexicanos)”, dijo Cuevas. “Pueden aprovechar su inglés, para que puedan enseñar o trabajar en la industria del turismo”.

El gobierno también, está trabajando en un programa que permitiría a los estudiantes en los Estados Unidos, transferir sus créditos universitarios a universidades mexicanas y recibir becas. También habrá facilidades para que los beneficiarios del DACA se conecten con los servicios de salud, entre otros; si es necesario, el gobierno les ayudará a mejorar su español.

Durante los próximos seis meses, los consulados en los Estados Unidos trabajarán para informar a los receptores de DACA de estos programas.

“No queremos que pierdan tiempo”, dijo Cuevas.

El consulado en Santa Ana, así como otros, asistirán a aquellos que necesitan renovar su estatus DACA durante el próximo mes, ayudando a navegar el proceso burocrático para permanecer en Estados Unidos. Hasta el momento, el consulado de Santa Ana ha recibido “algunas llamadas” de aquellos que buscan presentar solicitudes de renovación antes de la fecha límite de octubre, dijo Cuevas.

“Queremos que continúen viviendo sus vidas y no pierdan oportunidades”, dijo Cuevas. “Nuestro propósito principal de estar aquí es ayudar a la gente”.