IRVINE – Según el Departamento de Justicia de Estados Unidos, de 1995 a 2013, la tasa más alta de víctimas de violación y agresión sexual ha afectado a mujeres entre las edades de 18 a 24 años de edad.
Lo anterior se puso de manifiesto durante el foro “Está en Nosotros”, efectuado el miércoles, 4 de marzo, en el Cross Cultural Center de la Universidad de California, Irvine (UCI).
Las estadísticas son desgarradoras: en un centenar de casos, entre el 20% y 25% de mujeres en colegios o universidades han experimentado agresión sexual intencional o completa, de un centenar de casos en 300 colegios o universidades de Estados Unidos, y en uno de cada diez casos la víctima ha sido un hombre.
Así lo puso de manifiesto Mandy Mount, directora de la Oficina de Educación y del Campus de Recursos (CARE), en el Cross Cultural Center de UCI, el miércoles 4 de marzo.
Esta información llegó a días de que el documental The Hunting Ground estrenara en cines del país. El documental narras las historias de jóvenes que han sido atacadas sexualmente – y cuyos casos, en su mayoría – no han sido resueltos apesar de haberlos reportado a administradores de la universidad o a la policía.
“Estos sobrevivientes son tres veces más propensos a sufrir de depresión, 13 veces más de abuso de alcohol, 26 veces más de abusar de drogas y cuatro veces más contemplan el suicidio”, expuso la psicóloga y orientadora de CARE a decenas de mujeres y hombres.
Delitos reportados por UCI que no han sido objeto de verificación independiente por parte del Departamento de Educación de Estados Unidos revelan que en dicha institución en 2011se reportaron seis violaciones forzadas.
La cifra se duplicó un año más tarde a 12, y 13 violaciones se cometieron en 2013.
“En el pasado ciclo fiscal [2014] tuvimos cinco casos”, indicó Joe Reiss, teniente del Departamento de Policía de UCI. “Solamente un individuo fue acusado criminalmente”.
Bajo la ley federal Clery, las universidades del país deben reportar públicamente las estadísticas de delitos tales como homicidios, robos, asaltos agravados y delitos sexuales que ocurren en o cerca del campus.
Dicha ley fue firmada en 1990, en memoria de Jeanne Ann Clery. La estudiante de primer año de universidad fue violada, sodomizada, golpeada, mordida, estrangulada, mutilada y asesinada en 1986, en una residencia del campus de la universidad Lehigh de Pennsylvania.
El asesino, Josoph M. Henry, fue hallado culpable y sentenciado a morir en la silla eléctrica.
En 2014, un reporte de la Oficina de Derechos Civiles en el Departamento de Educación dio a conocer en mayo de 2014 que prestigiosas universidades y colegios como Harvard, Princeton, Arizona State y Michigan se encuentran bajo investigación sobre posibles violaciones a la ley federal sobre el manejo de casos de violencia sexual.
En su esfuerzo por aumentar la transparencia en la aplicación de la ley federal, también fueron nombradas UC Berkeley, la Universidad del Sur de California (USC), el Distrito de Colegios Comunitarios Butte-Glenn (en Oroville) y el Occidental College en Los Ángeles.
LEGISLACIÓN PARA DEFENSA Y EDUCACIÓN DE LOS JÓVENES
Como respuesta a la problemática en California, el gobernador Jerry Brown firmó en 2014 la ley SB 967 del senador Kevin de León, el cual requerirá que las universidades del estado adopten políticas de prevención de violaciones que incluyan un nivel de consentimiento afirmativo, consciente y voluntario para de ambas partes cualquier tipo de actividad sexual.
La medida, la SB 967 se inspiró en una serie de agresiones en los campus universitarios en los últimos años y la frustración por las víctimas que dijeron que no recibieron suficiente apoyo de las autoridades universitarias.
A finales de febrero pasado, De León y la senadora Hannah-Beth Jackson presentaron otro proyecto de ley, la SB 965, que transformará los planes de estudio de salud para educar a los adolescentes de preparatorias sobre la prevención de asalto sexual.
“Hemos creado una cultura que es tan anti-mujer joven y tenemos que disminuir la cantidad de misoginia que está teniendo lugar”, dijo De León. “Los hombres jóvenes van a tener que ponerse de pie. No pueden permanecer sin voz en este tema, y esto tiene que empezar en la escuela preparatoria”.
La legislación se centrará en la prevención mediante la educación de los estudiantes sobre el consentimiento afirmativo y las relaciones saludables.
“Como mujeres no debemos pensar que no hay peligro y pensar que todo está bien”, comentó Janette Courrejolles. “Para mi protección, siempre cargo en mi bolsa un tubo de gas pimienta…espero que nunca tenga que utilizarlo”.
