San Diego.- La fiscalía federal del distrito sur de California presentó cargos contra 22 integrantes de una red delictiva transnacional dedicada por más de una década al robo de tiendas en centros comerciales del país para después vender la mercancía en México.
En total, la organización criminal con sede de operaciones en San Diego, California, obtuvo ganancias de hasta 20 millones de dólares por la reventa de los productos robados, informó la fiscalía.
Un contingente de 250 oficiales de distintas corporaciones policiacas logró detener a doce de los presuntos responsables señalados en la acusación federal.
“El centro comercial debe ser un lugar seguro para que familias puedan comprar, comer y pasar el día. En su lugar, un grupo violento de ladrones ha robado millones de dólares en mercancía además de la tranquilidad de empleados y clientes”, declaró en un comunicado la fiscal interina de San Diego, Alana Robinson.
En uno de los domicilios, los agentes decomisaron cerca de 30 mil dólares en efectivo además de una docena de bolsas de basura repletas con ropa nueva que todavía contaba con las etiquetas de seguridad de tiendas conocidas como Victoria’s Secret, Hollister, Guess o Abercrombie & Fitch, además de ropa de marca como Calvin Klein, Hurley, Armani, Adidas, Kenneth Cole y Puma.
La fiscalía calificó a la organización como “muy organizada”, ya que llevaban operando por más de diez años, actuando en grupo para distraer a los empleados, estudiando los movimientos de las tiendas que pretendían robar y luego, efectuando su crimen a través de la utilización de bolsas especiales para burlar los dispositivos de seguridad en las entradas.
Incluso, los ladrones utilizaban la fuerza -cuando la veían oportuna- para agredir tanto a empleados, clientes o a elementos de seguridad para poder escapar, señaló la fiscalía.
En fotografías compartidas por la dependencia, se observan productos variados como ropa, zapatos, videojuegos, joyería y perfumes, entre otros.
La acusación federal identificó 38 robos a centros comerciales tanto en San Diego como en otras ciudades de California como Escondido, Oxnard, Ventura, Orange, Mission Viejo, Camarillo, National City, San Clemente y Northridge, entre otras.
También indicó a otros centros fuera del estado en Las Vegas, Nevada; Frederick, Maryland; Vancouver, Washington, y Schaumburg, Illinois.
Investigadores creen que la mercancía era recolectada en San Diego para después ser transportada a México en donde era vendida y distribuida a través de una tienda en Tijuana.
“(Los) crímenes que atraviesan las líneas jurisdiccionales pueden ser difíciles de investigar”, señaló la jefa de policía de San Diego, Shelley Zimmerman.
“Se requiere de una alianza y compromiso de agencias de todos los niveles para colapsar a los grupos criminales más sofisticados que hoy existen”, concluyó.
