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América Latina se “juega su futuro” si no entra al “internet industrial”

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Miami.- El chileno Pablo Bello, director ejecutivo de la Asociación Interamericana de Empresas de Telecomunicaciones (ASIET), aseveró que América Latina se “juega su futuro” si no se incorpora pronto al llamado “internet industrial”.

En unas declaraciones a Efe en Miami, donde asistió esta semana a una reunión de reguladores y empresas de telecomunicaciones, subrayó que es “urgente” acometer un cambio en la forma de producir en América Latina que incorpore las tecnologías de la información, para ganar en productividad y competitividad.

Bello, que también es director del Centro de Estudios de Telecomunicaciones de América Latina (cet.la), destaca que la productividad de las economías latinoamericanas no ha aumentado en los últimos años.

No enfrentar a tiempo “la digitalización y automatización” de los procesos productivos sería desastroso, subraya el director ejecutivo de ASIET, quien considera que es el “desafío más importante” que tiene por delante la región.

Si no se acomete esa tarea, el crecimiento económico esperado de América Latina en los próximos 15 años será entre un 40 y un 50 % inferior al de los 15 años anteriores, de acuerdo con cálculos de la consultora McKenzie, dice.

Para lograr el objetivo se necesita tanto liderazgo político como empresarial, señala Bello, quien destaca el papel que organizaciones como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y el banco de desarrollo CAF están desempeñando para hacer calar la idea.

“Lo primero es entender que éste es un tema urgente, importantísimo”, “si no lo hacemos el coste será altísimo”, dice.

Pero en paralelo a la incorporación de la tecnología al proceso productivo, América Latina tiene también la tarea de cerrar de una vez la brecha digital.

Pese a todos los avances en penetración, ancho de banda y tecnología móvil, que han estrechado “muchísimo” la brecha, “la mitad de Latinoamérica no está conectada”, subraya.

Para que la región se ponga a la par que el primer mundo en conectividad se necesitan inversiones por 400.000 millones de dólares en infraestructuras, agrega el director ejecutivo de ASIET, organización con sede en Montevideo.

Bello reconoce que no son tareas fáciles las que plantea, más aun cuando, según dice, América Latina “nunca se ha industrializado del todo”.

Cuenta con algunos polos industriales, como partes de Brasil, México y Colombia, pero su economía sigue basada en la exportación de materias primas, y en la economía digital, específicamente, “está muy rezagada”, agrega.

“Tradicionalmente América Latina exporta recursos naturales e importa productos elaborados y más complejos” y ese mismo modelo se “está replicando” en la economía digital, donde exporta “datos personales” a compañías como Facebook, Google y Amazon e importa “plataformas y servicios”.

Algo que debería cambiar, según Bello, quien menciona el hecho de que de los 100 sitios web más visitados por los latinoamericanos, solo 26 sean de la región, entre ellos Mercadolibre, Despegar y páginas de información.

Para el director ejecutivo de ASIET, que participó en Miami en un foro organizado por el Instituto Internacional de Comunicaciones, la necesidad de crear un mercado digital regional está tomando cuerpo como instrumento para eliminar dentro de ese espacio las barreras que impiden que “la economía digital fluya”.

También para que la región tenga voz y voto en la definición de las reglas de la “gobernanza” de internet, que ahora las fijan Estados Unidos y en menor medida la Unión Europea.

El idioma español es un “activo importantísimo” en ese esfuerzo, de acuerdo con Bello, quien destaca que en América Latina hay “condiciones, talento, capacidad de innovación y ganas” para entrar con buen pie a la economía del siglo XXI.

Lo que falta, concluyó, es “entorno institucional”, decisión política y liderazgo empresarial.

Bello subrayó también la importancia de “amoldar” los planes educativos de la región para achicar el déficit de ingenieros, técnicos y especialistas en gestión y desarrollo de tecnologías de información.