Los familiares de Daniel Muñoz, de 4 años de edad, quien fue asesinado a tiros el miércoles, 29 de julio, estaban consumidos por el dolor en la casa de la abuela del niño en Highland el jueves, 30 de julio.
Dos hombres fueron detenidos por el tiroteo fatal, informaron las autoridades.
La madre de Muñoz, Yuliana Morales, tuvo dificultad de expresarse mientras miraba fotos de “Danielito” en su teléfono. La residente de Rialto no podía reconciliarse con la idea que a menos de 24 horas, ella, su marido y otros ocho niños pasaron el día en Knott’s Berry Farm.
La abuela de Danielito, quien lo cuidaba la noche del miércoles, ha estado sufriendo ataques de ansiedad paralizante desde la muerte de su nieto. Morales dijo que no culpa a su suegra por lo que sucedió.
Al no tener suficiente espacio en el automóvil para llevar a todos los niños, Morales dijo, que ella y su marido dejaron a Danielito y su hermana en la casa de su suegra en la cuadra 7400 de McKinley Avenue. Le dijo a su hijo que lo llevaría la próxima vez.
Cerca de las 8:30 p.m. sobrevino el desastre.
El miércoles, Danielito estaba jugando con un pequeño oso de peluche en el patio delantero de la casa dijo su tía, Reina Isabel Hernández. Los familiares dijeron que Danielito era en general “un niño feliz”.
Hernández dijo, en español, que le pareció oír fuegos artificiales, mientras estaba afuera de la casa. Miró hacia el patio delantero, y vio al niño boca abajo en el suelo.
Los familiares agarraron a Danielito, quien sufrió una herida de bala en el cuello, y se lo llevaron al interior de la casa. Los paramédicos llegaron y lo trasladaron a un hospital, donde falleció más tarde.
La policía indica que ya tienen a los responsables.
Darron Marquis Daniels, de 20 años y residente de Moreno Valley, y Maurice Allen Kelley, de 25 años y residente de San Bernardino, fueron arrestados bajo sospecha de asesinato e intento de asesinato a las 8:45 p.m. del jueves, 30 de julio; fueron fichados en el Centro de Detención Central, como muestran los registros.
Ambos recibieron un cargo de asesinato y dos cargos de intento de asesinato, indicó un comunicado de prensa del Fiscal de Distrito del condado de San Bernardino.
Los dos hombres se declararon no-culpables a los dos cargos de intento de asesinato. Su próxima audiencia preliminar está pactada para el 11 de agosto en el San Bernardino Justice Center.
La denuncia criminal nombra a dos víctimas de intento de asesinato, Jordan Lee Roberts, y Armando Heredia, indicó Jodi Miller, vocera del Departamento del Alguacil del condado de San Bernardino.
El jueves 30 de julio, la entrada de la casa estaba manchada con sangre seca. Había un charco de sangre en el patio delantero, y un rastro de sangre que lleva a la extensión de la casa, donde vive la abuela de Danielito.
Los vecinos de la abuela reportaron haber escuchado entre seis y diez disparos la noche del miércoles.
T.J. Welch, vive en los apartamentos “Mountain Breeze Villas” a la vuelta de la esquina en Base Line. Welch dijo que escuchó los disparos desde el interior de su apartamento. Sus hijos estaban afuera.
“Agarramos a los niños, y los llevamos a dentro; nos aseguramos que todos estuvieran a salvo”, dijo Welch.
La avenida McKinley en la ciudad de Highland se compone principalmente de viviendas unifamiliares, con algunos edificios de apartamentos. Algunas casas, como en la que ocurrió el tiroteo, parecen ser más antiguas, mientras que otras han sido renovadas.
El vecino, George Cornell, dijo que la violencia es demasiado común en la zona.
Tyreed Scott, quien vive en un complejo de apartamentos en Base Line, dijo que no es raro escuchar disparos en el vecindario.
Los vecinos prepararon un altar para Danielito en la puerta que conduce a la casa de su abuela. Ositos de peluche, velas y flores yacían en el cemento.
La residente de Highland, Denise Smith, acudió en ayuda de la familia después del incidente, a pesar de que no los conocía. Sus dos hijos, Edgar Smith Jr. y Keymone Smith fueron asesinados a tiros en San Bernardino en incidentes separados el año pasado. Smith dijo que comparte el dolor de la familia.
“Mi corazón está con ella”, dijo Smith. “Voy a traer algunos comestibles y flores. Sé lo que están atravesando y, a menos que uno haya tenido una experiencia similar, no sabría lo que se siente”.
