El otoño es el mejor momento para preparar el césped para la próxima temporada de crecimiento podando, rastrillando, ventilando y fertilizando. Pero hay cambios en el plan de juego, si es que la sequía ha dañado su césped durante un largo tiempo. En ese caso, la preparación se intensifica en reparación.
“Hay que determinar si la hierba está muerta”, dijo Dave Minner, un especialista en extensiones de césped de Iowa State University en Ames. “Entonces tendrá que renovar, volviendo a sembrar todo para ponerlo en marcha de nuevo.”
Hacer caso omiso de partes muertas o dañadas en su césped sólo le costará más al final, dijo Minner.
“Las zonas muertas del césped que no se reparan en el otoño, probablemente serán invadidas por la maleza el próximo verano”, agregó.
El objetivo es conseguir que la nueva hierba que se siembra antes del invierno se fije adentro. “Plantar temprano”, dijo Minner. “Obtener hojas y cortar una vez o dos veces. El crecimiento debería producirse tres a cuatro semanas después de la siembra”.
Es difícil distinguir pedazos muertos de hierba inactiva, dijo Mark Schmidt, científico en jefe de John Deere. “Ambos se ven mal. Al llegar las lluvias abundantes o un clima más fresco, ¿los tendrá de vuelta? Mire la corona –que es la base de la planta de césped- y usted debería ver algo de color verde allí. Si usted no ve nada verde, lo más probable es que esté muerto o vaya a morir”.
El caliente sol del verano tardío, normalmente empuja a muchos céspedes en estado latente. La hierba se vuelve marrón, después de parar su crecimiento para almacenar energía. Esta condición persiste sólo hasta que las frescas lluvias del otoño llegan. La humedad pone las cosas verdes de nuevo, abriendo el camino para la revitalización de fin de temporada.
Aquí tiene cómo hacer frente a los céspedes estresados, para ayudarles a lidiar con una temporada más seca:
“Sea tan cuidadoso como le sea posible”, dijo Schmidt sobre el césped dañado por la sequía. “No lo rocíe con mucha agua de inmediato, ni le tire una carga de fertilizante sobre él”.
Para mayor facilidad de poda, haga un corte de césped más elevado. Continúe el riego para promover la recuperación de la hierba, si las restricciones locales lo permiten.
Rastrille las hojas que cayeron con la llegada del otoño. “Las hojas pueden dejar un tapete de humedad y bloquear la luz, lo que inhibe el crecimiento del césped”, dijo Schmidt. “Recójalas tan pronto como pueda, para que el césped pueda obtener suficiente energía y luz solar para crecer en la próxima temporada”.
Hay poco que ganar con la aplicación de fertilizantes en el césped quebradizo o seco, dijo Kurt Bland, presidente de Bland Landscaping Co. en Apex, Carolina del Norte, y un portavoz de Professional Landcare Network. “Es sólo una pérdida de producto”, dijo.
Vuelva a sembrar en las áreas dañadas, incluso en una sequía, dijo Bland. “Escarifique la superficie de la tierra para crear nuevos lechos de semillas”.
Las prácticas de manejo en el otoño y la primavera determinan qué tan tolerante será su césped en la sequía del verano, dijo Minner. Maximizar el volumen de base y la profundidad es eficaz y a prueba de sequías. Se reduce la necesidad de riego en el tiempo de calor de mediados del verano alrededor de los rollos.
“Todos los años, alguien va a experimentar la sequía en los Estados Unidos”, dijo. “En consecuencia, hay que preparar y mantener su césped”.
