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Las enredaderas pueden darle un toque especial a su jardín. Pero si no tiene cuidado, podrían salirse de control.
Las enredaderas pueden darle un toque especial a su jardín. Pero si no tiene cuidado, podrían salirse de control.
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Pocas plantas adornan árboles o enrejados tan maravillosamente como las enredaderas en flor. También pueden realzar el jardín con fragancia, proporcionan sombra y vistas de pantalla antiestéticas.

Pero tenga cuidado en las variedades que usted elija. Algunas cepas pueden ser necias.

Las enredaderas son de crecimiento vigoroso, lo cual puede ser tanto bueno como malo para los jardineros impacientes. Las variedades de crecimiento rápido proporcionan barreras gruesas que pudieran ser una cortina bien cuidada o metros de telones de fondo desagradables. Pero también podría abrumar camas estrechas de siembra y extenderse más allá de los sitios previstos. Eso significa que requiere supervisión constante y poda.

“No hay nada como las enredaderas como delicados accesorios de jardín”, dijo Bob Polomski, un horticultor y arbolista de Clemson University en Clemson, Carolina del Sur. “La mayoría son perennes y vuelven cada año, cargadas de flores. También proporcionan una sombra fresca, que es especialmente bienvenida en el Sur”.

Al mismo tiempo, dijo, “ser rápido (en crecimiento) es una cosa. Ser invasivo es otra”.

Él citó la hiedra inglesa, que ha superado tantas áreas en el este y el noroeste del país, que los estudiantes universitarios y otros equipos de trabajo con frecuencia tienen “extraen” para ayudar a controlarla.

“La hiedra se puede asumir como una cubierta de tierra”, dijo. “La wisteria puede crecer tan rápidamente y sus viñas ser tan espesas que pueden destruir un aparato pequeño” como un enrejado, una pérgola, etcétera. “Ellas crecen tan fuerte que incluso pueden acabar con los árboles”.

Saber dónde colocar las enredaderas es crucial, dijo Polomski.

Wisteria produce hermosas flores, pero atrae a las abejas. Poner sillas y mesas bajo una enredadera que está floreciendo puede invitar a picaduras de insectos y otros animalitos espeluznantes”, dijo. “Poner enredaderas en torno a los buzones puede no ser tan buena idea para los carteros, tampoco”.

Nada de esto debería desalentar a los dueños de propiedades a sumar enredaderas a su paisaje. Simplemente tienen que planificar primero.

Las enredaderas trepan de diferentes maneras, lo que puede ayudar a determinar qué variedad elegir: las que se aferran, las que se entrelazan o las que se extienden en el suelo.

Las enredaderas que se aferran, como Virginia creeper, trumpet vines y la hiedra, tienen zarcillos adhesivos o raicillas que las mantienen en superficies planas a medida que crecen. Eso puede hacer que sea difícil y perjudicial incluso eliminar la culebrilla o revestimiento de madera.

“Las raíces aéreas en algunas enredaderas se aferrarán a su camino en las grietas de las paredes y estuco y poco a poco podrían poner en peligro la estructura”, dijo Sydney Park Brown, un horticultor de la Universidad de Florida.

Las enredaderas como clemátides, jazmines, glicinias y gloria de la mañana, se entrelazan en espiral hacia arriba, girando alrededor de los postes, celosías o vallas.

Rosas, buganvillas y sweet peas son plantas que se extienden y a menudo deben ser atadas a un enrejado, sobre todo cuando empiezan.

Un par de cosas a tener en cuenta cuando añada soportes a sus plantas:

Dé espacio para respirar a las enredaderas para evitar el moho y la descomposición. Ajuste independiente el enrejado, a unos cuantos centímetros de distancia de estructuras.

Opte por la fuerza y el tamaño cuando haga su jardín, enrejado o pérgola. Las enredaderas pueden vivir por décadas y crecer fuertes con la edad.

Coloque las variedades aromáticas cerca de las puertas y ventanas para disfrutar mejor la fragancia.