Los recolectores de uvas tomaron el máximo provecho de las noches y mañanas frías que se experimentaron recientemente en la región para cosechar la vendimia anual del 2016 en Temecula.
El productor de uvas, Bren Drake, asegura que la cosecha empezó desde finales de julio y deberá concluir a finales de septiembre. En general, los productores anticipan una cosecha promedio, una parecida a la del año pasado.
La cosecha de este año pudo haber mejorado, dijo, si no hubiera sido por el clima que se ha experimentado.
“La temporada comenzó mal con una ola de calor en junio”, explicó Drake. “Y tuvimos algunos daños en algunos de los viñedos a causa del calor”.
La sequía que azota al estado dorado desde hace algunos años también fue un factor determinante. Drake explicó que la falta de lluvias permitió la acumulación de sal en el suelo y esto provoca que se dé una resequedad en parte de la cosecha. Normalmente, las tormentas de invierno limpian el suelo de la acumulación de sal.
“Será un buen año”, añadió. “Algunos de los resultados subieron, algunos de los resultados bajaron”.