Tras un año fuera de los reflectores, Daniel Arenas regresa como “el malo” de Nuestra Belleza Latina (NBL) VIP.
Y es que según cuenta en exclusiva , el juez “ugly es Osmel, el good es Jackie y yo soy el bad”.
Pero, aclara, “no soy el malo porque vaya a ser malo, sino porque voy a desempeñar el papel de decir lo que sienta. Entonces si es algo positivo lo voy a decir, pero también tener la libertad de que si algo vi mal o no me parece, y alguna de las niñas va por donde no es, pues también voy a poder decirlo”.
Entonces, el actor colombiano asegura que quiere desempeñar “la parte sincera” y ser “la persona que está diciendo las cosas como son” en el reality show de Univisión, que se transmite cada domingo.
Dice que más allá de la belleza física o la inteligencia, lo que él busca en las participantes es un balance.
“Yo pienso que tiene que haber un balance entre todo lo que vamos analizar con estas niñas. No es solamente la belleza, no es solamente el talento que traen, que también es importantísimo, sino también el background de las niñas, de dónde vienen, cuál es el sueño que están cumpliendo, por qué están aquí, cómo se desempeñan con las demás niñas. Acuérdate que va a ser también una especie de reality con ellas allá en su convivencia; son como tantos aspectos los que se están analizando, que estaría mal ponerle un porcentaje a una cosa y a la otra, es un todo”.
Apunta que “por lo menos, la niña que yo estoy buscando, la niña que yo quisiera elegir, debería sumar un poquito de todo, pero por supuesto que como dice el dicho, las cosas entran por los ojos y lo primero es que la niña llame la atención, como que tenga una belleza armoniosa y que llame la atención y si ya después de eso le sumas todo lo demás, pues va a ser la indicada”.
Con respecto a su relación con los otros jurados, dice estar “encantado”.
“Yo había tenido la oportunidad de conocer a Jackie en México porque trabajamos los dos para Televisa y nos habíamos conocido y cruzado en un par de cosas”, dice Arenas.
“Con Osmel nunca, obviamente que sé perfectamente quién es y lo que representa para este tipo de certámenes, y estoy gratamente sorprendido porque los dos son unos tipazos, me la he llevado muy bien, me he sentido como muy tranquilo, muy en confianza”.
Precisamente, Arenas dice que eso es lo que más busco en cualquier trabajo, “independientemente de que sea Nuestra Belleza, o una novela, o una obra de teatro, no hay nada más rico que llevártela bien con las personas que trabajas, sentirte fresco, sentirte libre, poder hacer comentarios, entonces por ahora estamos muy bien y me han caído muy bien los dos”.
Del tiempo que estuvo fuera de los reflectores del mundo del espectáculo, revela que fueron muchas razones las que lo llevaron a ese autoexilio, “pero yo creo que la principal era descansar y dejar descansar a la gente. Yo creo que es importante también cuando la gente descansa un poquito de uno, no saturar tanto la pantalla, que la gente te extrañe, que la gente te quiera ver, hacer otras cosas”.
Asegura que quiso desconectarse del todo de los medios, sin aparecer en programas, ni revistas, ni en eventos, “yo quería una desconexión total, creo que lo logré y creo que me siento renovado, vengo con otra agilidad”. con otras ganas, creo que era importante hacer ese alto, no lo había hecho antes porque obviamente no había podido, bendito Dios había tenido siempre trabajo y pues el año pasado lo hablé con mi empresa, que es Televisa, y les pedí ese tiempo y pues afortunadamente son una empresa muy consciente de muchas cosas y me dieron ese voto de confianza y eso fue lo que pasó”.
Pero este año vuelve con todo, “con muchas ganas de regresar y de hacer cosas y me estreno en 2016 con Nuestra Belleza Latina, que me parece cheverísimo y estoy feliz de estar aquí”.
“Con el corazón en la mano”, dice que nunca ha sentido la parte negativa de su trabajo, “creo que soy de los pocos artistas o personas de los medios que puede decir que tiene una carrera limpia, yo nunca he estado en ningún escándalo, en nada negativo gracias a Dios y creo que eso también es gracias a mi manera de ser, de pensar y de comportarme, soy una persona que respeta no 100 por ciento, sino 200 por ciento el oficio que tengo”.
Aunque está consciente de que “es un gremio donde la gente habla, especula, estoy consciente de eso y nunca me dejo afectar por eso, yo trabajo para Televisa, Televisa sabe perfectamente cómo soy yo, mi forma de ser, de actuar, de pensar, el por qué el año pasado quise estar alejado, para mí que mis jefes directos sepan qué es lo que pasó, eso ya es lo importante; si algún medio se inventó que si yo con un productor o lo que sea, créeme que no es de peso en mí, yo tengo mi conciencia tranquila, la gente que me conoce sabe quién soy, cómo soy, y pues bueno, como dicen por ahí, si van a hablar, que hablen, estoy tranquilo”.
Revela que ya está en pláticas para otro proyecto en televisión con Televisa, del cual aún no puede hablar, pero asegura que está seguro de “ya querer volver, entonces yo todo lo veo como positivo y si alguna persona lo ve como negativo, lo respeto mucho, pero no es lo que yo veo dentro de la trayectoria que he tenido”.
Por lo pronto, invita a sus fans del sur de California a “que estén pendientes de Nuestra Belleza Latina VIP, estoy muy emocionado, es un nuevo reto, feliz de ser parte de este proyecto ya en su décimo aniversario”, pues asegura que “será una temporada inolvidable porque son cosas que jamás se han visto antes y me siento muy honrado, muy orgulloso de estar en esta temporada y se la van a pasar muy bien, es una cosa que nadie se espera, las cosas que van a pasar, y los invito a que no se lo pierdan porque va a estar in-creí-ble”.
Sus novelas
La Gata (2014) – Pablo Martínez Negrete
Corazón Indomable (2013) – Octavio Narváez
Amorcito Corazón (2011/12) – William “Willy Boy” Guillermo Pinzón Hernández
Teresa (2010) – Fernando Moreno Guijarro
Doña Bella (2010) – Nicolás Ayala
La Sucursal del Cielo (2008) – Samuel
Nuevo Rico, Nuevo Pobre (2007) – Edwin Alfonso
Los Reyes (2005) – Santiago “Santy” Iriarte
La Venganza (2002) – Danilo Fontana
