José Luis “Lou” Correa fue juramentado como congresista ante su comunidad del Distrito 46 del condado de Orange y, tras declarar que el pueblo de Estados Unidos no eligió a un “rey”, en alusión al presidente Donald Trump, aseguró que su labor y mayor compromiso en el Congreso será “la defensa de toda la raza”.
El mensaje de Correa se dio después que el presidente anunció en su cuenta de Twitter la inminente construcción del muro de 2 mil millas en la frontera con México y la publicación de la apertura de propuestas de diseño y construcción, así como su orden ejecutiva de denegar el ingreso a Estados Unidos de musulmanes provenientes de siete países.
Correa, nacido el 24 de enero de 1958, en Anaheim, destacó que los problemas sociales que afectan a las comunidades de la nación se resuelven en base a las leyes y al respeto que debe prevalecer entre los poderes de gobierno, entre ellos, el judicial.
“Estoy contento que usted defienda el Poder Judicial”, dijo Correa al juez de la Corte Superior del Condado de Orange, Frederick P. Horn, quien presidió el juramento. “Todos sabemos que no elegimos a un rey”.
El político latino de 59 años de edad, quien prometió defender la Constitución de Estados Unidos de cualquier enemigo, local o extranjero, publicó una carta enviada al Departamento de Inmigración y Aduanas de los Estados Unidos (ICE), después de las recientes redadas masivas de inmigrantes en el país, incluido el Sur de California.
En la misiva al director interino de ICE, Thomas Homan, Correa pidió respuestas no resueltas hasta ahora sobre la anticipación, planificación y aplicación de las actividades de los agentes de inmigración, el acceso de un abogado a cada uno de los detenidos, las prioridades de la agencia para deportaciones, el número de personas arrestadas, y cuántos eran hombres, mujeres o niños.
Otros cuestionamientos por parte del congresista era saber el número total de personas arrestadas, si tenían antecedentes penales, el tipo de presuntos delitos cometidos, el tiempo de procesamiento estimado para los individuos arrestados y los lugares específicos a donde fueron enviados.
“Nos regimos por las leyes del país”, dijo Correa en su discurso de juramentación. “Nosotros no elegimos a un rey [Donald Trump]”.
El político dijo que representará los intereses de la comunidad del centro del condado de Orange., contra cualquier ataque a grupos de cualquier religión y los inmigrantes, hecho que recalcó en diversos talleres comunitarios.
“Hubiera querido traerles buenas noticias, pero no…No es la primera vez en la historia que inmigración es un tema nacional; antes lo fueron los irlandeses, alemanes, italianos; luego los latinos y otros”, dijo Correa. “La promesa de que este es el país más fuerte teneos que hacerla realidad para el pueblo inmigrante”.
Recordó a uno de ellos: José Ángel Garibay, el infante de marina inmigrante indocumentado, nacido en Los Tecomates, Jalisco, criado en Costa Mesa y que murió en la Guerra de Irak, en marzo de 2003.
“Garibay murió sin ser ciudadano”, expresó Correa a las decenas de políticos y partidarios que acudieron a su juramentación. “Luego obtuvo la ciudadanía póstuma; por ello, el tema ser inmigrante no es blanca o negra, sino también la historia de quienes les falta documentos han contribuido enormemente a Estados Unidos”.
