Los supervisores del Condado de San Bernardino dijeron esperar una mayor colaboración, con un enfoque en la creación de trabajos, mientras el concejo le dio la bienvenida a sus dos nuevos miembros y al regreso del tercero, el 3 de diciembre.
James Ramos y Robert Lovingood – ambos electos el mes pasado – fueron juramentados ante una multitud de partidarios junto con la directora del concejo Josie Gonzales, quien fue relegida en junio para su tercer término.
Ramos, en particular, se postuló bajo el lema de cambiar la imagen del condado, derrotando al titular Neil Derry en una campaña que enfatizó la declaración de culpabilidad de Derry a un delito menor por cargos financieros.
“Creo que el mensaje es que el Condado de San Bernardino está cansado de la forma en que hemos hecho negocios en el pasado”, comentó Ramos durante una entrevista después de la ceremonia de juramentación. “Los constituyentes buscan legítimamente un cambio”.
Ese cambio inicia con la forma en que los supervisores debaten temas y se comunican entre si, agregó.
“Si puedes tener un dialogo abierto con tus compañeros del concejo, entonces serás capaz de alcanzar más logros”, comentó.
Sin nombrar directamente a sus predecesores, Gonzales describió a los dos nuevos supervisores como líderes que estarán abiertos al diálogo. Ella dijo que Derry no estaba dispuesto a trabajar con otros supervisores y agregó que algunos antiguos supervisores estaban más preocupados con salvaguardar su territorio.
“Esta es, con la gracia de Dios, la primera vez desde que fui elegida como oficial que tenemos un excelente concejo en el condado”, comentó.
Gonzales, de 60 años, alcanzó una fácil victoria en junio, derrotando a dos novatos políticos para obtener su tercer termino representando al quinto distrito.
Ella ha tenido un papel de alta visibilidad como directora del concejo por los últimos dos años, y que llegará a su fin en enero.
Los cambios dejan a Gonzales y a Gary Ovitt como los únicos supervisores que han estado en el concejo por más de un término. La supervisora Janice Rutherford fue electa en el 2010.
El nuevo concejo también es el más diverso que el condado ha tenido con dos mujeres – una de ellas latina – y Ramos, quien es el primer supervisor nativo americano en la historia del condado. Gonzales describió al concejo como uno que en verdad refleja al condado.
Ramos, de 45 años y antiguo jefe de la influyente tribu San Manuel, describió su elección como un hito importante para él y su comunidad. Él dijo haber sentido la magnitud del evento cuando su padre, James Ramos Sr., condujo su juramento, para que él luego tomara su puesto tras el estrado del concejo.
El nuevo supervisor del tercer distrito dijo haber crecido en una casa móvil cuando la tribu era pobre – antes de inaugurar su exitoso casino – y que posteriormente se convirtió en el primer miembro en obtener un título de negocios M.B.A., cuando se graduó de la Universidad Estatal de San Bernardino en el 2009.
“En realidad todo viene de la educación”, comentó. “Si eres capaz de obtenerla y de seguir adelante y de ayudar a tu comunidad, nadie puede detenerte”.
Ramos, quien es dueño de dos restaurantes, dijo que una de sus prioridades será trabajar con el sector privado para buscar formas en que el condado pueda relajar las regulaciones de negocios. Él dijo que piensa pasar tiempo conociendo mejor su distrito, el cual incluye comunidades desde Barstow a Big Bear y Twentynine Palms.
Ramos dijo que también espera crear una atmosfera de “respeto mutuo” entre el concejo y los 19,000 empleados del condado. Los grupos sindicales laborales, que han tenido una relación difícil con los supervisores durante el último año, fueron algunos de los mayores partidarios de Ramos durante la contienda.
“Tenemos que empezar a darnos cuenta de quienes son en verdad los engranajes que mantienen al Condado de San Bernardino en movimiento todos los días”, comentó. “Queremos asegurarnos que todos estén orgullosos de decir que trabajan para el Condado de San Bernardino”.
En el primer distrito, Lovingood, de 54 años y hombre de negocios de Apple Valley, dijo que aun se encontraba en proceso de mudarse a su oficina y escoger a su personal. Pero dijo que desde ya se había comunicado con los otros supervisores y esperaba ansioso trabajar con ellos en su mayor prioridad electoral: crear desarrollo económico.
“No se va a desperdiciar mucho tiempo para que las cosas empiecen a funcionar”, comentó. Lovingood se impuso en la contienda primaria a otros siete candidatos antes de derrotar al concejal de Apple Valley, Rick Roelle, en la segunda vuelta electoral del mes pasado.
Él remplazó a Brad Mitzelfelt, quien escogió postularse por el distrito 8 del congreso en su lugar. Mitzelfelt fue derrotado en las elecciones primarias.
