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LEGAL: Familia del hombre cuya muerte a tiros por la policía causó protestas, demanda a Santa Ana

 Jazmín Canepa y Mia, de 2 años, la esposa e hija de Ernesto Javier Canepa Díaz, de 28 años (su fotografía es la de la izquierda), asisten a una emotiva rueda de prensa en la oficina de sus abogados en Tustin el 3 de marzo del 2015. Canepa Díaz fue asesinado a tiros por la policía de Santa Ana.
Jazmín Canepa y Mia, de 2 años, la esposa e hija de Ernesto Javier Canepa Díaz, de 28 años (su fotografía es la de la izquierda), asisten a una emotiva rueda de prensa en la oficina de sus abogados en Tustin el 3 de marzo del 2015. Canepa Díaz fue asesinado a tiros por la policía de Santa Ana.
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La familia del hombre asesinado a tiros por la policía presentó una demanda federal en contra de la ciudad de Santa Ana, acusando a los agentes del uso de fuerza excesiva en el ejercicio de lo que alegan fue un allanamiento y detención ilegal.

La muerte a tiros de Ernesto Canepa durante una investigación de robo el 27 de febrero provocó protestas acaloradas por parte de la familia y partidarios en una reunión del Concejo de la ciudad de Santa Ana, así como el escrutinio del gobierno mexicano.

Según la policía, los agentes revisaban un vehículo estacionado en la cuadra 1000 de West Third Street, que coincidía con la descripción de un automóvil involucrado en el robo de una cadena de oro arrebatada a una mujer de 63 años de edad. Según los informes, se toparon con Canepa y se produjo un tiroteo que dejó como saldo a muerte de Canepa.

La policía no detalló qué provocó el tiroteo, aunque indicaron que Canepa “dejó de cooperar” en algún momento durante el enfrentamiento con los agentes.

Los testigos afirmaron que Canepa estaba desarmado. Las autoridades indicaron que se encontró una imitación de pistola en el vehículo de Canepa.

Los familiares y amigos describen a Canepa como un hombre amoroso con su familia y quien tenía dos trabajos para mantener a sus cuatro hijos. Los vecinos dijeron que no participaba en actividades de pandillas y no era violento.

El sábado, las demandas federales se presentaron en nombre de dos de los hijos de Canepa por los abogados Humberto Guizar y Ángel Carrazco. Además de la ciudad de Santa Ana, ambas demandas federales nombran como demandado a Christopher Shynn, el agente quien la policía indicó que disparó a Canepa.

Las demandas alegan que Canepa estaba sentado en su vehículo, sólo y desarmando, cuando Shynn disparó varias veces hacia Canepa, varias de las balas impactaron a Canepa en la cara.

“El uso de la fuerza letal en contra de Canepa fue excesiva y objetivamente irrazonable bajo las circunstancias, sobre todo porque en todo momento Canepa estaba desarmado y no representaba una amenaza”, escribió Guizar en una de las demandas, que también alega que la policía no pidió atención médica de una manera oportuna.

Los funcionarios de Santa Ana se negaron a comentar sobre las demandas, citando una política de no discutir litigios pendientes.

La muerte a tiros de Canepa inmediatamente llamó la atención de manifestantes, de los cuales una docena se presentó a una reunión del concejo en marzo donde airadamente gritaron: “¡asesinos!” y “¡cerdos!”, y preguntando, “¿quién mató a Ernesto?”

La muerte de Canepa también fue condenada por el Ministerio de Relaciones Exteriores de México, junto con otros dos tiroteos en contra de nacionales mexicanos en Texas y el estado de Washington durante el mes de febrero.

Una declaración del gobierno mexicano publicada a principios de marzo pidió que se les informe de los resultados de las investigaciones sobre el tiroteo, y pidieron que la policía de Santa Ana “repare” su relación con la comunidad local.

La periodista Alejandra Molina contribuyó con este informe.