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Foto de registro de Victor Salazar.
Foto de registro de Victor Salazar.
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SANTA ANA, California Un ex terapeuta infantil fue acusado de abusar de tres inmigrantes adolescentes en California, informaron el mes pasado las autoridades del condado de Orange.

Los fiscales dijeron a un jurado que encontraron a Víctor Salazar culpable de cuatro delitos graves contra un menor de edad y dos cargos menores por delitos sexuales.

Las autoridades dijeron que Salazar trabajaba como administrador de casos en la casa hogar Florence Crittenton en Fullerton. La institución da refugio a niños que viven sin sus padres, ya sea porque éstos fueron deportados o porque los menores llegaron solos a Estados Unidos.

Los fiscales informaron que Salazar abusó de los menores en su oficina entre mayo de 2007 y febrero de 2008 cuando ellos utilizaban el teléfono para llamar a sus familias en América Latina.

La abogada del acusado, Lisa Eyanson, dijo a los jurados que su cliente nunca tuvo intención sexual en su contacto físico con los menores y aseguró que estaba tratando de consolarlos.

Más de 6,000 niños, la mayoría de Guatemala, El Salvador y Honduras, fueron puestos bajo custodia federal en el año fiscal 2009 bajo un programa supervisado por las autoridades de salud. La mayoría de ellos, al igual que las víctimas en el caso contra Salazar, eran adolescentes, de acuerdo con estadísticas oficiales.

En un principio, Salazar fue acusado de haber abusado sexualmente de seis adolescentes y fue acusado de cuatro delitos graves por cometer actos lascivos contra menores, tres cargos por copulación oral con un menor y siete acusaciones menores de delitos sexuales.

Un guatemalteco atestiguó que Salazar lo tocó entre las piernas entre cinco y 10 veces a pesar de su renuencia. El ahora adulto dijo que el ex terapeuta era el responsable de decidir si era enviado con una familia de acogida o de regreso a Guatemala.

Desde el arresto de Salazar, el centro en Fullerton ha capacitado a su personal sobre los riesgos de pederastia bajo un programa especial enfocado en niños refugiados e inmigrantes. La casa hogar también instaló puertas con ventanas, mejoró la vigilancia con sistemas de video y prohibió que sus empleados trasladen solos a niños.