Phoenix.- Políticos y líderes comunitarios de Arizona calificaron como un “insulto” la posibilidad de que el presidente Donald Trump indulte al polémico ex alguacil Joe Arpaio y algunos opinaron que una medida así alentará los sentimientos de “ultraderecha” en el país.
“El presidente Trump afirma que apoya ‘la ley y el orden’, pero ahora dice que quiere perdonar a un criminal condenado, como es Joe Arpaio”, sentenció la directora de Promesa Arizona, Petra Falcón.
“Esto sería una vergonzosa injusticia y una bofetada en la cara a toda la gente, incluyendo a tantas familias inmigrantes que Arpaio victimizó durante su tiempo en el cargo. Nosotros estamos aquí para que la Casa Blanca sepa que esto no se cumplirá”, aseguró.
El pasado domingo el gobernante republicano declaró en una cadena televisiva que está considerando “seriamente” concederle el perdón al ex sheriff Arpaio, condenado por desacato a la justicia, porque hizo “mucho en la lucha contra la inmigración ilegal”.
“Él es un gran patriota estadounidense y odio ver lo que le está sucediendo”, declaró Trump.
Salvador Reza, activista y representante del Comité de Defensa del Barrio Tonatierra, dijo a Efe que indultar a Arpaio sería “como tirarles un hueso a los nazis, a todos los de ultraderecha, es darles fuerza y es amedrentar a nuestra comunidad”.
“Además es un insulto a los jueces federales, es un insulto a la Constitución y a todo el sistema de Estados Unidos”, expresó.
El diputado estatal por Arizona, Tony Navarrete declaró a Efe que Trump está actuando de manera “irresponsable” al expresar su intención de dejar libre de culpa a Arpaio.
“Es una movida muy irresponsable y una falta de respeto a las comunidades latinas, esa persona (Arpaio) le faltó el respeto a la ley, gasto mucho millones de dólares de los votantes para ejercer sus prácticas, separó a miles de familias”, resaltó.
Arpaio fue declarado culpable el pasado 31 de julio por desacato a las órdenes de la corte por una jueza federal de Arizona, quien determinó que es culpable de desobedecer intencionadamente las órdenes de la Justicia en un caso de discriminación racial.
El “ex sheriff más duro del Oeste”, de 85 años, recibirá su sentencia el próximo 5 de octubre y de acuerdo a la ley podría afrontar hasta seis meses de cárcel.
