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  • Enrique Bunbury salió vestido de negro de pies a cabeza,...

    Enrique Bunbury salió vestido de negro de pies a cabeza, pantalón, chaleco sin camisa y saco negro con costuras y detalles en rojo, lentes de aviador negros y melena alborotada.

  • Enrique Bunbury durante su presentacion como parte de su gira...

    Enrique Bunbury durante su presentacion como parte de su gira 'Mutaciones Tour 2016' el lunes 23 de mayo en el House of Blues de Anaheim.

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    Enrique Bunbury durante su presentacion como parte de su gira 'Mutaciones Tour 2016' el lunes 23 de mayo en el House of Blues de Anaheim.

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    Enrique Bunbury durante su presentacion como parte de su gira 'Mutaciones Tour 2016' el lunes 23 de mayo en el House of Blues de Anaheim.

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ANAHEIM – El pasado lunesa las 8:30 de la noche se apagaron las luces de un legendario House of Blues lleno hasta el tope para dar paso a Los Santos Inocentes, como llama el aragonés a su banda.

El que fuera líder de la banda española Héroes Del Silencio, Enrique Bunbury salió vestido de negro de pies a cabeza, pantalón, chaleco sin camisa y saco negro con costuras y detalles en rojo, lentes de aviador negros y melena alborotada. Bunbury es la perfecta imagen del ‘rock star’.

Pero atrás quedó el Bunbury del camino del exceso, el de los arranques déspotas y de estrella, el Bunbury de ahora es uno mucho más maduro y convencido que su paso por la historia del rock latino es ya de referencia. No solo por su historia con Héroes, sino por el trabajo como solista que viene haciendo desde que se separó de la banda en el año 1996.

Empezó la velada con una de las canciones que lo dieran a conocer con su ex grupo ‘Iberia sumergida’, un casi himno para los fans de hueso colorado de ‘Héroes’ para después continuar con “El club de los imposibles” y fue después de esta segunda canción saludó el aragonés a su público.

“Buenas noches, cabrones”, les dijo, sabiendo que la mayoría de la gente reunida ahí era mexicana. El público respondió con el grito de “Enrique, Enrique, Enrique”.

“Un inmenso placer estar con ustedes esta noche, Anaheim”, dijo el artista. “Tenemos muchas ganas de celebrar con ustedes. Son 30 años de mutaciones, 30 años de canciones y queremos hacer un recorrido por todas las etapas, por todos los momentos de estas tres décadas. Esperamos que el repertorio que seleccionamos para esta noche sea de su agrado”.

Después de esto siguió con ‘Dos clavos a mis alas’ para no parar de tocar éxito tras éxito, fuesen de su etapa con héroes o como solista, hilvanando uno tras otro desfilo: ‘Sirena varada’, ‘Porque las cosas cambian’, ‘El camino del exceso’, ‘Avalancha’, ‘Que tengas suertecita’, ‘El extranjero’ y ‘Me calaste hondo’.

Prácticamente entregándose al público y el público desde el principio entregado a él, Bunbury no paró de complacer a todos aquellos que conocen su música desde sus inicios con su ex grupo y como solista. Después de dos horas de recuerdos y éxitos donde no pudieron faltar ‘Héroe de leyenda’, ‘Entre dos tierras’ y ‘Apuesta por el rocanrol’. Se despidió con ‘Lady Blue’.

Agradeciendo a sus fans por el cariño recibido, les dijo: “Californianos y californianas, latinoamericanos, mexicanos, dominicanos, argentinos, y españoles, muchísimas gracias a todos por acompañarnos esta noche. No se olviden de nosotros”.

Algo que no será fácil de olvidar por los próximos meses o hasta que vuelva a tocar por estos rumbos.