El miedo siempre ha sido algo que el mundo ha experimentado. Ya sea en tiempos de guerra mundial, o tal vez con el caos local. El miedo por nuestra seguridad y por todos los que nos rodean siempre es algo que nos preocupa. Nadie nunca quiere saber que uno de sus seres queridos está en peligro. Hacemos todo lo que podemos para asegurarnos de que nuestra seguridad nunca esté en riesgo, y demandamos protección de todos aquellos que se encargan de eso.
Últimamente, la seguridad pública se ha vuelto un tema popular. Todos están preocupados con lo que el gobierno vaya a hacer para mantenernos seguros y para mantener las armas letales fuera de las manos de criminales. La semana pasada, el presidente Obama propuso un plan que ayudaría a reducir la cantidad y el tipo de armas que están accesibles al público.
Según los medios, el presidente le está pidiendo al congreso pasar una legislación que requiera una revisión del historial de cada persona, antes de que se le autorice la venta de un arma y reestablecer una prohibición sobre armas de alta capacidad, al igual que reautorizar y aumentar la prohibición de armas de asalto que se expiró en 1994. Aparte pidió que se aumentaran los castigos para los criminales de armas y confirmar su nominado para director de ATF.
Se cree que todo esto ayudará a bajar la violencia de armas, que es lo que todos quieren, en especial hoy en día cuando parece que hay masacres en todos los noticieros. Sin embargo, no todos están de acuerdo con abandonar sus armas. Muchas personas a favor de tener armas, se han manifestado en contra de la propuesta. Algunos creen que tienen derecho de portar armas para protegerse, sin darse cuenta de que esas son las mismas armas con las que otras personas están asesinando.
Los estudiantes a lo largo de la nación sintieron miedo los días después de los asesinatos. Muchos estudiantes de escuelas elementales les pidieron a sus padres quedarse en casa. Ese es un miedo que no se quita tan fácilmente. Incluso los estudiantes universitarios han tenido miedo de seguir con sus vidas normales con tanta violencia. Nadie piensa en que eso les puede pasar a ellos, hasta que sucede.
Los estudiantes universitarios están cuestionando e informándose acerca de leyes y propuestas para mejorar su seguridad, no sólo en la escuela sino en todas partes.
Muchas personas dicen que no es la pistola la que mata, es el que jala el gatillo. Pero para aquellos que han perdido a alguien a causa de una pistola, es una combinación de las dos cosas y establecer una restricción en la compra de armas es algo que les gustaría tener. Todos quieren poder ir a cualquier lugar sin temer por sus vidas. Si el gobierno puede hacer algo para ayudar a reducir ese miedo, tienen la obligación de hacerlo. Asegurar la seguridad de la gente debe ser su prioridad a toda hora.
“Si hay incluso una cosa que podemos hacer para reducir la violencia, si hay tan sólo una vida que se puede salvar, es nuestro deber tratar de hacerlo”, dijo el presidente Barack Obama.
El presidente está listo para hacer los cambios; ahora es nuestra responsabilidad pedirles a nuestros congresistas que pasen ese plan para ayudar a mantener seguros nuestros hogares, nuestras comunidades y nuestras escuelas.