La residente de Wildomar, Luisa Castillo, sonrió cuando se enteró que hay agua potable limpia que fluye a través de los grifos de su casa.
“Es maravilloso, es un día maravilloso”, dijo Castillo, mientras tomaba un descanso del riego de su jardín el lunes, 17 de noviembre. “Podría hasta saltar de la alegría”.
La residencia de Castillo en la calle, Greenwood Avenue, es una de los cerca de 140 hogares en un vecindario que limita con la ciudad de Menifee que han sufrido los estragos de agua de pozo de mala calidad y un servicio errático proporcionado por una pequeña empresa privada.
Las autoridades sanitarias del condado advirtieron a los residentes desde hace mucho tiempo no beber agua debido a su nivel peligrosamente alto de nitratos.
A medida que el sistema se deterioró, los propietarios acordaron finalmente, bajo la presión de las autoridades estatales y del condado, a ceder el control de suministro al condado de Riverside en una administración judicial, mientras que los distritos municipales de agua de Elsinore Valley y Eastern se preparan para hacerse cargo de la entrega de agua.
Mientras tanto, Elsinore Valley instaló una línea de suministro de emergencia y comenzó a bombear agua potable a partir del lunes a la comunidad rural situada al norte de Bundy Canyon Road.
“Creo que recibir agua de la línea de emergencia será un alivio para todos”, dijo Lyndsey Amagrande, una de las residentes que llamó la atención de las autoridades a la situación precaria del vecindario.
Amagrande dijo que la calidad del agua ha sido mala desde que se mudó a su casa en Greenwood hace 10 años, y describió la situación “como una pesadilla”.
Sus comentarios se escucharon después que un grupo de funcionarios que participaron en la complicada transición se reunieron en el vecindario para celebrar la ocasión con algunos comentarios.
“La crisis de salud pública que envolvía a esta comunidad se terminó”, dijo Paul Jones, gerente general de Eastern.
A pesar que los distritos de agua estaban planificando la toma de poder por un par de años, hubo numerosos obstáculos burocráticos que tuvieron que superar.
Uno de los más grandes fue la posibilidad de demandas judiciales y la renuencia de ambos distritos para intervenir sin que tuvieran protección contra dichas demandas.
Esa protección llegó a través de un proyecto de ley redactado por el senador estatal Richard Roth (demócrata de Riverside), con el apoyo de la asambleísta estatal Melissa Meléndez (republicana de Lake Elsinore), ambos estuvieron presentes en la celebración del lunes.
Meléndez dijo que pensó que obtener apoyo para el proyecto de ley en la Asamblea sería más fácil.
“Realmente tuvimos que trabajar en la Asamblea y explicarle a todo el mundo lo importante que era esto”, dijo.
Las autoridades del condado jugaron un papel clave en la orquestación de la transición, que requiere ir al tribunal para tomar el control del sistema de suministro a través del proceso judicial.
“Estamos básicamente frente a condiciones del Tercer Mundo para los residentes de este vecindario”, dijo el supervisor del condado, Kevin Jeffries.
Castillo dijo que el tener agua limpia aliviará la carga de tener que acarrear agua embotellada a los animales de su granja.
“Si no es lo suficientemente limpia para que una persona se pueda lavar con esa agua, no es lo suficientemente limpia para alimentar a los patos y pollos”, explicó.
El vecino de Castillo, Gordon Jensen, dijo que la situación precaria del agua ha existido durante la mayor parte de los 22 años en los que ha vivido en el área.
“Abrías el grifo, y lo que salía parecía leche”, dijo.
Jensen dijo que intentó vender su casa en los últimos dos años, sin éxito.
“Esa es probablemente la razón por qué no he podido venderla”, dijo. “Venían personas a verla, pero luego se enteraban de la situación del agua”.
Ahora que la línea de emergencia está funcionando, los distritos de agua se centrarán en su plan de instalar tuberías nuevas desde su sistema de suministro hacia el vecindario. El representante de relaciones públicas de Eastern, Kevin Pearson, dijo que el trabajo tomará alrededor de un año después de finalizar el contrato en las siguientes semanas.
